Una comitiva infantil saldrá el sábado a las 10 de la mañana de la nueva ikastola.
Recorrerá el barrio y a las 12 se encontrará con Mari Domingi en la Casa de Cultura
Este sábado, 24 de diciembre, a las 10 de la mañana, una comitiva de niños y niñas, saldrá de la nueva Aiete Ikastetxea, en Hiru Damatxo, llevando en nuevas volandas a un Olentzero, personaje mítico y simbólico que, con mucho interés y cariño, de trapos y paja, ellos mismos han fabricado. Partirá sentado sobre unas andas -también obra suya-, adornadas con ramos de laurel.
El desfile del viejo carbonero por las calles y caseríos del barrio, en la víspera de Navidad, es una vieja tradición. Las comparsas de niños y niñas de Aiete, van postulando de casa en casa, de comercio en comercio, de una zona a otra del barrio, llevando un mensaje de paz, de esperanza, de alegría. El Olentzero anuncia la Navidad, y con ello, el solsticio de invierno en Aiete, que representa el fin de un ciclo y el inicio de otro.
Las niñas y niños portarán a hombros un muñeco con la cara tiznada, la pipa en la boca y un farol en la mano, una representación del viejo y simpático carbonero. Compondrán el séquito ocho anderos, que lo harán a turnos, mucha gente menuda y un grupo de bolseros. Lo postulado se entregará a Cáritas
En la plazoleta de Etxadi, a las 10 y media, espera el grueso de la comitiva, allí recibirán todos a este Olentzero figurante, clásico de barrios urbanos como Aiete, un Olentzero artesanal, una representación del carbonero feo y con una sonrisa que le recorrerá toda la cara. La dulce inocencia esperará atónita, alegre y esperanzada al Olentzero que les compensará sus deseos y sus juegos. El Olentzero visitará los comercios de los soportales de Etxadi acompañado del coro compuesto por padres y niños que entonarán diversas canciones de navidad. Algunos aprovecharán la ocasión para sacar fotos y grabar vídeos.
La música la pondrán los txistularis Juan Carlos Berzosa y Ana Etxeberria, acompañados de trikitixas y pandero, con la ya consagrada Izaskun Izagirre a la cabeza. El cortejo se detendrá en el vetusto Topaleku y, tras atravesar los jardines del palacio de Aiete, en festiva comitiva, llegará a la Casa de Cultura. En el salón de actos, a las 12, les espera la muy bella Mari Domingi «¿Maridará con el Olentzero de trapo y papel?», se preguntan entre bromas los organizadores.
El encuentro entre Mari Domingi y Olentzero es muy especial, destello de un barrio que, poco a poco, hasta en este detalle, va cambiando. El conjunto de la caravana, amenizada con txistus y trikitixas, acompañará a la ilustre pareja.
Los adolescentes salen a cantar por nuestras casas y calles
En el 24 de diciembre se permite pedir a los ‘chavales’. Es también una tradición. En su día lo hacían los pastores asalariados, es decir, los encargados de cuidar los rebaños comunales, que cosechaban vituallas. -Como se puede leer en el libro de Pedro Berriochoa, ya agotado- El dinero en las colectas data de tiempos muy recientes. Es una oportunidad para que los más pequeños de la casa llenen sus huchas de ilusión y deseos.
GORKA LARRUMBIDE Diario Vasco 21 12 16