Hace unos días Lantxabe se dirigió al Ayuntamiento. Escribía que como la guardia municipal había procedido a poner la correspondiente multa a las motos que invadían los soportales de Etxadi, ahora el espacio había quedado libre de motos, pero la suciedad y abandono se hacían más evidentes. Y rogaba al Concejal Delegado “pueda dar los consejos oportunos para que un brigada de limpieza proceda a hacerlo en Etxadi. Será un paso consolidado para ennoblecer el lugar público, para hacer más amable el comercio y para que la gente entienda que los soportales no son un parking de motos”.
Hoy los soportales reúnen la misma suciedad y las motos han empezado a volver a los arkupes, con el peligro que suponen cuando circulan, a veces demasiado rápido, a las puertas de los comercios o para los críos que empiezan a andar y se apoyan en sus tubos de escape a cientos de grados de temperatura -Esto ha sucedido-
Y es que el problema de la gestión de la limpieza y mantenimiento en Etxadi, sigue sin resolverse. Argumenta el ayuntamiento que los soportales son un espacio privado; pero la normativa actual -consultados asesores jurídicos de la calle Andía-, dice que la limpieza viaria, en todo Etxadi, es responsabilidad del ayuntamiento.
Ahí siguen las motos y la suciedad
Y las que había el miércoles?