La propaganda institucional ahora se llama BiciBizi y dice que la bicicleta invadirá Gipuzkoa a finales de mayo; pues bien más vale, y es más sencillo, permitir que las bicicletas puedan ser usadas, en este caso en los barrios altos de la ciudad, en concreto en el barrio de Aiete, en el que todavía se espera la inversión de los 150.000 euros para hacer posible la comunicación de los ciclistas con el ascensor de Morlans, que para eso se construye, recordamos, para que el uso de la bici sea factible en Aiete.
Dice la propaganda de las autoridades provinciales que “Es innegable que andar en bicicleta es saludable desde un punto de vista físico, medioambiental y de movilidad. Pero por si quedara alguna duda, por pequeña que sea, el último fin de semana de mayo, Gipuzkoa se volcará por completo en el mundo de la bicicleta y sus bondades. El motivo se llama BiciBizi y el objetivo de este festival que se estrena este 2017 es seguir concienciando de la importancia de utilizar este medio de transporte saludable. ¿Cómo? A través de más de una veintena de actividades para todos los públicos y gustos”.
¿Y por qué razón, una vez más, no se compadece lo que se predica (y de manera tan sonora y cara) con lo que se hace?