La investigación se ha realizado con la intención de dar respuesta a la sospecha de que en la sociedad y en la educación existe un gran desconocimiento del mundo del caserío
Promovido por la Diputación Foral de Gipuzkoa, hace año y medio se abordó un proceso participativo para dinamizar el sector primario, en colaboración con diversos agentes de dicho sector. “El inicio consistió en un espacio para la reflexión, a fin de consensuar los retos que tiene el sector. Para la gestión de dichos retos, se crearon tres grupos de trabajo: Rentabilidad, Gestión y Comunicación. En todos ellos están trabajando con empeño, y lo que presentamos hoy es el primer fruto”, ha precisado Xabier Arruti, director de Agricultura y Desarrollo Rural.
La idea de realizar esta investigación ha surgido del grupo de trabajo de Comunicación, en el que se sospechaba que en la sociedad y en la educación existe un gran desconocimiento del mundo del caserío, por lo que se solicitó a Pedro Berriotxoa, investigador, historiador, antropólogo, profesor e ingeniero agrónomo, que llevara a cabo la investigación. En los resultados, Berriotxoa ha concluido que “los libros de texto de las escuelas están llenos de estereotipos sobre la población de los caseríos”.
En la investigación se han analizado los libros de texto de ocho editoriales que se utilizan en Educación Primaria y Educación Secundaria Obligatoria (EP y ESO) por un alumnado de edades comprendidas entre 6 y 16 años. “A pesar de que en algunas editoriales la sensibilidad hacia el caserío es manifiesta, en otras se confirman los siguientes estereotipos: caserío antiguo; edén bucólico; tradicional y folclórico; mujer de caserío, invisible; autárquico; apartado y lejano; ahistórico…” ha explicado Berriotxoa. “Desde el exterior, se da una imagen positiva del caserío, una imagen atractiva, pero totalmente asociada al folclore, lo que supone una carga para el caserío”, ha añadido.
El investigador ha manifestado que son prejuicios que se encuentran lejos de la realidad, y con el fin de evitarlos, se ha recopilado una serie de recomendaciones para poner a disposición de todas las editoriales, particulares y centros de enseñanza que deseen crear material didáctico sobre el caserío y su población.
Berriotxoa ha finalizado diciendo que la imagen que reflejan los libros de texto es también reflejo de la opinión mayoritaria que la sociedad tiene sobre el caserío y que el cambio de uno puede ayudar al cambio del otro.
Información ampliada en Noticias de Gipuzkoa
‘Un estudio analiza la imagen de los caseríos en los libros escolares
La investigación halla una serie de estereotipos como “tradicional, folclórico y antiguo”
Sábado, 5 de Mayo de 2018
Con el objetivo de dinamizar el sector primario, la Diputación de Gipuzkoa puso en marcha hace año y medio un proceso participativo en colaboración con diversos agentes. De este encuentro surgió una investigación que ha analizado los libros de texto de ocho editoriales que se utilizan en Primaria y Secundaria para reflexionar sobre la imagen que tienen los caseríos.
“A pesar de que en algunas editoriales la sensibilidad hacia el caserío es manifiesta, en otras se confirman los siguientes estereotipos: caserío antiguo, edén bucólico, tradicional y folclórico, mujer de caserío, invisible;y ahistórico”, indicó Pedro Berriotxoa, investigador del análisis, ayer durante la presentación de los resultados.
Berriotxoa ha recopilado una serie de recomendaciones de cara al futuro para evitarlos, que serán puestas a disposición de todas las editoriales, los particulares y los centros de enseñanza. 
Asimismo, el investigador aseguró que la imagen que reflejan estos textos se corresponde con la de la opinión mayoritaria de la sociedad, por lo que “el cambio de unos puede ayudar al cambio de la otra”.
espacio de reflexión
El proyecto forma parte de un espacio de reflexión que la Diputación lleva a cabo junto al propio sector primario. “Una vez que consensuamos los retos del sector, se crearon tres grupos de trabajo: rentabilidad, gestión y comunicación”, explicó el director foral de Agricultura y Desarrollo Rural, Xabier Arruti. “Entre todos se está trabajando en este empeño, de lo cual esperamos que este sea el primer fruto”, añadió.
Los libros analizados abarcan a alumnado de entre 6 y 16 años, dado que la investigación había dectetado previamente una serie de prejuicios en dicha franja de edad. – N.G.