Sabíamos que estaba muy enfermo, pero su muerte ha sido muy dolorosa para toda la gente que estamos en la construcción del caserío Katxola y de Lantxabe.
Manu es el padre de hacer un tolare vivo en Katxola, dotarle de alma, que prense la manzana y que fabrique la sidra.
Queremos dar un fuerte abrazo a sus más allegados, a sus hijos, Ana y Mikel Ochoa, Pablo y Patricia Isa, Manu y Xabi; a sus nietos: Pablo, Paula y Diego; a sus hermanos: Yvonne y Christian Hasse; a Teresa Riera y Paloma Ruiz de Azúa, a su familia y amigos, con muchos de ellos compartimos ideas y proyectos
Manu fue una persona muy activa a lo largo de su vida. No haremos aquí un obituario pero sí ponemos en el recuerdo que aunque en su curriculum figura que era un arqueólogo marino, el decía que se sentía más marino que arqueólogo. “Marino que me he movido muchísimo en la arqueología en el mar. Yo llevo inmerso en este mundo desde los años setenta del pasado siglo, si bien en la arqueología terrestre he estado desde bastante antes”
Por lo que se refiere a su relación con Lantxabe y con Katxola, en una entrevista con Raul Pérez para Irutxuloko Hitza, decía “Me hace mucha ilusión el proyecto; el corazón de Munto, va recuperar la vida, va a latir en Katxola. Va a traer el recuerdo de la industria de antes de Donosti; cuando se hacía y vendía la sidra”.
Hitza editó la entrevista en el 2007, http://www.aiete.net/2013/05/manu-izagirre-fue-clave-para-recuperar-el-tolare-en-katxola/ pero Lantxabe, en esta web, la volvió a editar 16 de mayo de 2013, como acción de justicia reparadora
“Las dueños de Munto, Joakina y Juani, vendieron el caserío y cedieron a la Asociación, para llevar a Katxola, el lagar y otros objetos muy interesantes”, continuaba
Y proseguía “La asociación de vecinos tiene que conseguir que el proyecto esté patrocinado por cuantos mas organismos mejor. Si Diputación, Ayuntamiento y Gobierno participan, mucho mejor”
Manu nos ayudó a conseguir los fondos de la Diputación y del Gobierno Vasco para poderlo hacer. No es momento de entrar en detalles, Manu no lo dijo, pero también se trajo a Katxola, para contar con su apoyo en la Institución Vasca, a Alberto Santana Ezkerra, director de ‘una historia de Vasconia’ serie de ETB, gran defensor de la historia y el paisaje de Euskel Herria. y autor de varios libro sobre los caseríos
(En la foto una de las páginas dedicadas al Caserío Katxola)
La Asociación de Vecinos de Aiete presentó un proyecto de 1.000 € a la Diputación para iniciar la reconstrucción del lagar y crear una ambientación de fábrica de sidra. Se recibió el visto bueno de la Diputación y 500 euros. La DF otorgaba una subvención del 50%. del proyecto. La firma de la solicitud es del 19 de Mayo de 2005.
Manu nos convenció que había que ir más lejos que la presentación ambiental de un caserío barroco de finales del XVIII y que se podía conseguir un tolare en Katxola que elaborara sidra y se consiguió.
Dos años más tarde, con la ayuda del Ayuntamiento, la Diputación y el Gobierno Vasco, el caserío Katxola estaba preparado para hacer sidra
Esa herencia los donostiarras se la debemos a Manu Izagirre
Honor a su persona