El mal tiempo afectó a la segunda de las dos jornadas de estas fiestas en nuestro barrio que contaron con un invitado esperado, anunciado, pero que nadie deseaba, la lluvia. La climatología afectó a la organización de las fiestas pero sólo se aplazó “la fiesta de la espuma”, el resto del programa festivo continuó y los eventos tuvieron un fuerte apoyo en los lugares a cubierto previstos: en los arkupes de Munto o Etxadi o en los espacios cubiertos de la Casa de Cultura -campeonato de ajedrez en la foto-o las piscinas de Etxadi.
La falta de acompañamiento de la climatología no impidió la presencia en las calles del barrio de las jóvenes trikitixas, la txaranga The Joselontxo´s y la compañía municipal de txitularis, en ocasiones, frente a un auténtico vendaval de agua. Los actos no quedaron deslucidos o eso nos pareció a nosotros.
En efecto el sábado por la mañana el tiempo no fue bueno, pero permitió un normal desarrollo de trikitixas y ajedrez; por la tarde fue peor y uno de los festejos más atractivos para niños y jóvenes, la “apar festa”, se vio claramente afectado por la intensa lluvia y el frío y hubo de aplazarse hasta una mejor ocasión.
El domingo el tiempo empeoró y la celebración de la diana fue más complicada. Aún así, ya hemos dicho, los txistularis le echaron valor –como siempre- y recorrieron el barrio de cabo a rabo, como estaba previsto desde un principio. El ¡Goazen Itsasora! De Iker Diez hubo de hacerse en el interior de la Casa de Cultura, con decenas de niños gozando del espectáculo (a rebosar).