El txupinazo no corrió a cargo del Ochote Ozenki, sino de algunos forofos de la propia asociación.
Como el año pasado, el Ochote Ozenki deleitó al público asistente que abarrotaba la sala . Y este año ha superado al anterior.
Así Aiete dio inicio a sus fiestas, con el festará a cargo del Otxote Ozenki, encargado de poner la nota de color a este acto, y encendió la mecha de dos fines de semana muy intensos -se prolongarán hasta el domingo, día 18- en los que la música y el color inundarán las calles del barrio.