Pierden nuestros astilleros, ganan los de Holanda y Noruega
Los astilleros vascos y españoles deberán pagar una sanción multimillonaria por el llamado ‘tax lease’, el sistema de ayudas que recibió el sector naval entre 2005 y 2011 para financiar la construcción de buques. La multa será efectiva desde abril de 2007, como se especificaba en el tercer borrador de resolución elaborado por el comisario de Competencia, el socialista vasco Joaquín Almunia.
El acuerdo se ha adoptado en la reunión hoy del Colegio de Comisarios de la Comisión Europea, formado por 28 miembros y el presidente de la CE, José Manuel Durao Barroso. Hasta seis comisarios, encabezados por el vicepresidente y comisario de Industria, Antonio Tajani, eran contrarios a la multa y propusieron devolver las ayudas desde 2009, lo que hubiera reducido considerablemente la multa que ahora se calcula en cerca de 2.000 millones de euros.
La propuesta inicial del socialista vasco Almunia era retrotraer la sanción a 2005, lo que elevaba la multa a cerca de 2.800 millones de euros. Sin embargo, la decisión tomada supone la estocada al sector naval, puesto que en las cláusulas de los contratos del tax lease se establece que cualquier problema con la financiación deberán ser asumida por los astilleros.
La multa tiene un impacto directo en el sector, en los astilleros y en los 87.000 empleos directos e indirectos. El asunto se judicializará y los astilleros, ante la inseguridad jurídica, tendrán muy complicado acceder a contratos de construcción de barcos. De hecho, en los dos años que ha durado la investigación del tax lease por la CE, la industria naval española ha perdido 50 contratos a favor de sus competidores europeos, como Holanda y Noruega.