Los aietearras critican que el proyecto para regenerar la zona, ya aprobado, sigue sin arrancar
Foto A. Garcia
NG Miércoles, 5 de Marzo de 2014
El bosque de Miramon no acaba de ser realidad. El proyecto para transformar el entorno en un nuevo parque sigue a la espera y los aietearras no entienden el retraso, que achacan a la falta de acuerdo entre el Gobierno municipal y el Parque Tecnológico de Miramon, que financiará las obras.
La asociación de vecinos Lantxabe de Aiete recuerda que el proyecto diseñado por Lur Paisajistak, ganador del concurso de ideas para transformar Miramon, está ya aprobado. El objetivo es visibilizar el bosque, mejorar los accesos y los caminos y transformar el anfiteatro para convertir esta zona en un nuevo parque y punto de encuentro para todos los donostiarras. Tras un acuerdo suscrito entre el Ayuntamiento y el parque tecnológico hace casi diez años, el Consistorio permitió a Miramon ampliar su superficie construida a cambio de que invirtiera en su entorno hasta once millones de euros, de los cuales, algo más de un millón es lo que, en principio, se destinará a regenerar el bosque.
Lo cierto es que esa partida del parque tecnológico tenía fecha de caducidad (el 31 de diciembre de 2013), de ahí que los vecinos se preocupen ahora al ver que las obras siguen sin arrancar. De todos modos, antes de que finalizara el año pasado el proyecto estaba ya aprobado.
Ambulatorio, ascensor y Munto
Lantxabe teme que el bosque de Miramon se sume a la lista de los proyectos «atascados» en el barrio, como el nuevo ambulatorio, la plaza de Munto o el ascensor. En el caso del ambulatorio, los aietearras apelan tanto al Gobierno municipal, que debe ceder la parcela, como al Gobierno Vasco, que asumiría la obra, a que den un paso adelante, después de que el Pleno municipal reclamara recientemente la construcción de este centro de salud.
En el caso de la plaza de Munto, Lantxabe insiste en que es un compromiso del Gobierno donostiarra que, en este caso, sí tiene reservada una partida. Por eso los aietearras, pendientes de una reunión con los responsables del Ayuntamiento, demandan que se emprenda ya esta obra.
El ascensor también contaba con partidas previstas para trabajos de movilidad vertical el año pasado pero, finalmente, no se materializó.
Lantxabe considera que estas cuatro obras son los «puntos cardinales» que necesita el barrio en estos momentos. La quinta, el nuevo colegio público, parece que sí se hará realidad tras varios años de retraso: el Gobierno Vasco se ha comprometido a que esté concluido en dos años.
Tres veces a la semana, salvo excepciones, subo por Illumbe, hasta el parque de Miramon, es mi ejercicio, a buen paso. Algunas veces subo por Katxola o por el gran teatro, Oriamendi, Etxadi, jardines de Aiete…y no entiendo cómo es posible que el gobierno se niegue a hacer un ambulatorio en este barrio que veo crecer desde hace años.
Ineficacia, mala fé, contubernio, desgana ¡Qué gente tiene encargado el gobierno de la cosa (res) pública!