Ayete se mantuvo como una de marcado carácter rural que la configuraba como un espacio próximo pero a la vez alejado del “centro” y de la evolución urbanística (y social) de la ciudad hasta 1962.
El Plan Genral de Ordenación Urbana, de ese año, documento que recoge las previsiones y propuestas para el desarrollo urbanítico de la ciudad, fue el primero que trata específicamente estas características “intrínsicas” de Ayete y se plantea la ordenación urbanística de Morlans, Puyo, Melodi, Etxadi, Bera-Bera, etc.
En esta época Ayete contaba con 2.022 habitantes.
El Plan General estableció para el barrio las siguientes consideraciones:
“…los edificios construidos no tapen la visbilidad de los montes situados en el fondo….”
“…proyectar zonas deportivas para juego de fútbol, balóncesto, tenis, etc…”
“…deberá tener en cuenta la ´existencia de los jardines del palacio de Ayete´ y crear un poblado de categoría en sus alrededores..”
“…residencias de edificación unifamiliar adosada, en consonancia con el carácter de ciudad jardín..”
Cincuenta años después, la trama urbanística de Ayete forma parte de la del conjunto de la ciudad y contaba, según donostia.org; con 7.981, mujeres; 7.681, hombres; total, 15.662 habitantes (A día de hoy se superan los 16.000)