O los componentes para el recuerdo del caserío Munto en la plaza/Muntoko plazaren elementu oroigarriak.
En este nuevo concurso de ideas abierto, es necesario que todas aquellas imágenes, sensaciones, ilusiones, pensamientos, juicios, conocimientos, conceptos, nociones, reflexiones, modelos, proyectos, planes, bosquejos, esbozos, bocetos, diseños, opiniones, se pongan encima de la mesa.
Tenéis a vuestra disposición esta web y el correo de Lantxabe (lantxabe@gmail.com).
Pero también cuentan vuestros propósitos, intenciones, resolución y empeño; sobre los asuntos de fondo o de forma; sobre aquellas ideas que consideréis ingeniosas o pragmáticas; sobre cualquier materia, pero en principio los titulares que se nos proponen son los siguientes:
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Baserriaren maketa/Maqueta del caserío
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Toka jolasa/Juego de toca
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Baserriaren historiaren panelak/Paneles con la historia del caserío
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Muntoko tolarearen elementuren bat/Algún elemento de lagar de Munto
Los de la foto están guardados en un almacén municipal de Ibaeta.
Construido en el siglo XVI, el inmueble sufrió infinidad de avatares décadas atrás. Desde varios incendios a visitas de célebres personajes, como Napoleón, que durante sus estancias en España pasaba muchas horas en él.
Lo mismo hacían los camioneros en el itinerario de la capital guipuzcoana a Madrid y viceversa, e infinidad de donostiarras que culminaban cenas y meriendas con canciones populares o con los versos entonados por José Sorozábal y su hijo Nicolás, los bertsolaris del cercano Bera Bera. La sidrería se convirtió en una de las más conocidas y frecuentadas de la ciudad, además de funcionar como punto de encuentro de los vecinos de las inmediaciones.
Su cierre dejó un vacío y multitud de recuerdos en la memoria de los habitantes de más edad, recuerdos que hablan de decenas de pollos rojos, como los que aún se pueden ver en algunos caseríos, que correteaban por el merendero, de animadas reuniones de familias.
Era una casa grande, amplia, antigua, que respira sabor añejo por sus cuatro costados. Está situada en una zona privilegiada de Donostia, donde abunda el aire, el sol y el ambiente saludable (Ahora está rodeada de una nueva urbanización conocida como Munto Berri)…
Los viejos del lugar decían “tiene más de 500 años y se mantiene en pie y buenas condiciones”. De allí, de principios de siglo XX, eran los baserritarras Agustin, Xanti y Pedro Illarreta, expertos en los trabajos del caserío y en la fabricación de sidra. Una hermana, Manuela Illarreta, se casó con Fernando Urrestarazu y tuvieron cuatro hijos, Ixidro llevó el peso del caserío hasta y sus hermanas han sido las últimas dueñas pero ya con el caserío cerrado, se vendió a unos arquitectos.
El ambiente del merendero era muy agradable, era un sitio tranquilo, siempre de buen humor. La gente cantaba versos y canciones populares. Del cercano Bera Bera eran los bertsolaris José Sorozabal y su hijo Nicolás, de ellos se cuentan muchas anécdotas.
Eran famosos los pollos de Munto, pollos rojos, hermosos, que todavía se ven en algunos caseríos. Solían criar entre 35-40 aves que correteaban por el merendero.
Munto ha sido punto de reunión de familias y de jóvenes de todo Donostia. Allí en un ambiente festivo se hacían las famosas afari– merienda. Era también el punto de encuentro de los vecinos de Aiete, está situado en su centro mismo. Las Aieteko Jaiak se celebraban entre Munto y el Jolastoki.
Los antiguos dueños cedieron el Tolare y todo el instrumental de fabricación y conservación de la sidra (kupelas, embotelladoras, etc), así como las piezas etnográficas correspondientes (cartelería, útiles de hostelería) a la Asociación de Vecinos de Aiete (Lantxabe) para que esta Asociación instalara el lagar y el conjunto de la fábrica en Katxola.
Donostia eta Hernani arteko errepide zaharraren ondo-ondoan dago Munto, eta hori dela eta, gotorleku ere izan zen, batik bat XIX. mendeko Karlistadetan. Bigarren Karlistadan izan zen Muntoko bataila ezaguna.
Dena dela, borrokekin baino gehiago, sagardoarekin lotu da Munto. Izan ere, 60ko hamarkada arte sagardotegi izan zen, eta 90eko hamarkada hasieran, askaldegi. Sagardoa zerbitzatzeaz gain, saldu ere egiten zuten. Zuzenean upeletatik. Ohitura bitxia ere bazegoen; erramua jarri ohi zuten sagardotegiaren atean upel bat hasten zutenean.
PEDRO MANUEL UGARTEMENDIA
Historia de la reconstrucción de San Sebastián
Miguel Artola
1963
Editado por el Ayuntamiento de San Sebastián, entre otras publicaciones, con motivo de las Conmemoraciones Centenarias de la Reconstrucción y Expansión de la Ciudad.
( 150 años desde el incendio y 100 años del derribo de las murallas)
Referencias al caserio Munto de Ayete.
pág. 42 –
El Ayuntamiento entretanto, ignorante del trabajo realizado por los arquitectos, impaciente por otra parte de dar principio a la reconstrucción de uno cualquiera de los proyectos presentados, envió el día 15 de febrero comisionados a Ayete, al caserío Montoa, donde a la sazón vivían los arquitectos, con el encargo de que “pidiesen a los dos profesores la breve conclusión de su encargo y noticias de lo que habían trabajado en el plan o planos que hubiesen trazado”.
Pág. 157 –
“En tal estado,dijo el expresado señor alcalde Echagüe que de su orden escribió ayer el infraescrito secretario a los dos arquitectos insinuándoles que para las 10 1/2 de esta mañana estaban convocados todos los señores de la Junta de Obras y a cuya hora se reunirían también los señores que constituyen este Ayuntamiento”, etc. Miranda respondió que Ugartemendía aún no había llegado a Montoa.
Ambas citas se refieren al año 1815 y los arquitectos mencionados son Pedro Manuel Ugartemendía y Alejo de Miranda.
Quien quiera ahondar en el tema no creo que tenga dificultades, pues la historia de la reconstrucción de San Sebastián ha tentado a muchos.
No dejéis de leer las págs. 70 y 71 para comprobar lo que ha quedado en la memoria de la ciudad de quien tanto se esforzó por ella.
26/04/2014
José Ramón Marticorena Elizondo
El caserío Munto se encontraba situado, hasta hace dos días, en el cruce de dos carreteras que antaño tuvieron una gran relevancia; la Goiko Galtzara, la más importante comunicación entre San Sebastián y el Camino Real de Madrid-Baiona; y la carretera que va a El Antiguo y Zapatari, una de las tantas rutas del Camino de Santiago. En el archivo del marqués de Rocaverde, en un legajo del siglo XVI, se dice que una de las novias aporta como dote el caserío de Munto, al Convento de San Bartolomé.
El edificio ha sido, además, testigo estratégico de varios episodios bélicos, ya que durante la guerras de Sucesión en 1719, la guerra de la Convención en 1813 y, posteriormente, en las Guerras Carlistas, la Casa de los Fallet -después palacio de Ayete- y caseríos de alrededor fueron cuartel general y lugares de inicio de asedio a la ciudad, así como de cruentas batallas. También sirvió de refugio, venta y hospital a los supervivientes del incendio de la ciudad en 1813
Tomó su relevo una sidrería que convirtió Munto en punto de encuentro a generaciones de vecinos de Ayete y afamados bertsolaris hasta que sus puertas se cerraron a en los años 80.
He visto el nombre de Jose Ramon Marticorena Elizondo, aunque entrando en la página no lo encuentro. ¿Podrían ayudarme a localizarlo?