Lógicamente la gente organizada en torno a Lantxabe, a la organización vecinal, quiere aprovechar el impulso ciudadano en el espacio Katxola y potenciar este espacio público: caserío, frontón, auditorio.
Llevamos años bregando con este propósito; se han ido promovido unas cuantas actuaciones concretas que tienen este objetivo en los planes de rehabilitar el Bosque de Miramón.
Esta tarea ha tenido un gran impulso, con altibajos, durante estos tres últimos años.
Como se sabe, la vecindad y usuarios de los caminos del parque, participaron en las ideas que sirvieron para el concurso posterior, que terminó ganando el equipo de Lur Paisajistak, con un gran protagonismo del mencionado simbólico triángulo.
Los trabajos están llegando a su final. Tras un largo receso, de casi un año, por problemas que hemos ido comentando, tenemos el proyecto definitivo de ejecución para rehabilitar el Bosque en su conjunto. Y con este plan, la gran oportunidad para que la reparación se haga con los criterios de la ciudadanía y en un plazo breve, como anunció el gobierno municipal esta misma semana.
Estamos pues en la recta final para conseguir los objetivos iniciales que nos propusimos: hacer el Bosque más visible en la ciudad, más accesible a la gente que quiera disfrutar de esta singular selva urbana, mejorar las condiciones de paseo, y defender y recuperar su flora y su fauna autóctona.
Por eso es necesario, es imprescindible, que todas las personas que a lo largo de estos años han ido aportando ideas, soluciones, imágenes nuevas, para el Bosque, volvamos a reunirnos y decidamos, entre todos, qué hacer, tenemos una última palabra, es nuestro momento, no lo podemos dejar pasar. Todas las personas del barrio y de Donostia estamos invitados, a la reunión del próximo jueves, día 16, a las siete de la tarde en la Casa de Cultura de Aiete, donde se someterán a consideración, debate y decisión las últimas actuaciones concretas en estas áreas:
Caserío Katxola, Teatro, Frontón y Estanque sobre la erreka Pakea (situado próximo al anfiteatro, debajo del viaducto), tratamiento específico de la cercana Fuente de la Virgen;
Pasarela próxima a Illunbe que lleva a la gente de Amara directamente al Bosque;
Mejora de los caminos y senderos para facilitar el paseo;
Mejora del mobiliario urbano: papeleras, mesas de picnic, bancos, barandillas;
Señalética adecuada: información sobre el parque, recorridos, elementos naturales;
Entradas al Bosque urbano por Katxola-anfiteatro, Mikeletegi, Botánico, Errotatxo e Illunbe, que conectaría con la nueva pasarela;
Habilitación de zonas de descanso;
Huertas aromáticas en el BCC;
Zonas de juegos;
Actuaciones sobre arbolado caído, movimientos de tierra general, muros y estructuras general;
Mantenimiento y mejora de la biodiversidad (flora) y mejora de las condiciones del hábitat para la fauna;
Saneamiento red de recogida de aguas pluviales, regatas naturales, presas naturales y artificiales;
Mejora de los elementos de luz según necesidad, características y disposición
y, por último, como punto más importante, garantizar la participación organizada de la vecindad en la vida del Bosque Urbano, incorporando criterios sociales, históricos y culturales al desarrollo futuro de este espacio público, haciendo del caserío Katxola su centro de interpretación.