¿Para qué se hicieron una foto ayer Mariano Rajoy y Pedro Sánchez? Ya sé, para firmar un pacto contra el terrorismo yihadista, vale. Pero venga, en serio, ¿para qué se hicieron ayer esa foto tan solemne, con mesa de firma, banderas al fondo y apretón de manos?
Que sí, que la lucha contra el terrorismo es muy importante. Pero coincidirán conmigo en que lo acordado ayer no merece tanta pompa.
Así que, insisto: ¿qué sentido tiene esa foto? Para qué nos regalan una imagen cuya única utilidad es ponérselo fácil a los humoristas y a los fabricantes graciosos, que con las fotos de ayer tienen como para saturarnos el whatsapp durante meses?
¿Sucederá muy a menudo o serán casos aislados? ¿Llegarán hasta acordar la «estabilidad institucional» con carácter general, Gobierno central incluido, como querrían algunos? No lo sabemos. Pero por ahora, para que se nos vaya preparando el cuerpo, Rajoy y Sánchez se han dado un apretón de manos preventivo. Como diciendo: «Mira, no pasa nada, la cosa más normal del mundo».
Tenemos que conseguir que se aplique sobre todo a los politicos corruptos, una vez devuelto todo lo robado.
¿Para qué se hicieron una foto ayer Mariano Rajoy y Pedro Sánchez? Ya sé, para firmar un pacto contra el terrorismo yihadista, vale. Pero venga, en serio, ¿para qué se hicieron ayer esa foto tan solemne, con mesa de firma, banderas al fondo y apretón de manos?
Que sí, que la lucha contra el terrorismo es muy importante. Pero coincidirán conmigo en que lo acordado ayer no merece tanta pompa.
Así que, insisto: ¿qué sentido tiene esa foto? Para qué nos regalan una imagen cuya única utilidad es ponérselo fácil a los humoristas y a los fabricantes graciosos, que con las fotos de ayer tienen como para saturarnos el whatsapp durante meses?
¿Sucederá muy a menudo o serán casos aislados? ¿Llegarán hasta acordar la «estabilidad institucional» con carácter general, Gobierno central incluido, como querrían algunos? No lo sabemos. Pero por ahora, para que se nos vaya preparando el cuerpo, Rajoy y Sánchez se han dado un apretón de manos preventivo. Como diciendo: «Mira, no pasa nada, la cosa más normal del mundo».