No es lo que parece (ni lo que se espera)

Si empiezan con la plaza de Munto; pediremos que se hagan los trabajos pendientes en la puerta principal de acceso a los jardines del palacio de Aiete.

PUERTA

1 comentario en “No es lo que parece (ni lo que se espera)”

  1. En un breve e interesante reciente libro, Mike Davis expone que “los latinos salvarán a la ciudad gringa” (es el título de la obra). Jane Jacobs, en su clásico Muerte y vida de las grandes ciudades, sentó las bases de la negación o autodestrucción de las ciudades. La ciudad es ante todo un espacio público, una mezcla de poblaciones y actividades, un sentimiento de posesión compartida en sus calles y plazas. La ciudad solamente con edificios, sean para vivir o para trabajar, y con medios de transportes e infraestructuras no es ciudad. Es, en el mejor de los casos, una zona urbanizada. Un cuerpo sin alma, le falta la ciudadanía, es decir, la dimensión pública, la expresión de la vida colectiva.
    Los ciudadanos se expresan en el espacio público. Son “conciudadanos”. Se es ciudadano en su relación con los otros, iguales en derechos y deberes. La ciudad late a partir de su corazón, el centro, o sus centros en las grandes urbes. Es allí donde se concentran los flujos de las personas y de las ideas, las memorias colectivas y les puntos que transmiten sentido a la vivencia urbana. El centro irradia sobre la ciudad, de él emergen los ejes estructurantes que ordenan la ciudad. Los ciudadanos se posesionan de la ciudad ocupando su centro, o sus centros. Entonces, cuando todos, o una gran masa que los representa, se hacen presentes en las plazas y calles del centro principal de la ciudad, cuando manifiestan ser un poder social que planta cara al poder político-institucional y al poder económico, entonces devienen plenamente ciudadanos. Y la ciudad es ciudad de ciudadanos, no una simple escenografía.

Deja un comentario

WP Twitter Auto Publish Powered By : XYZScripts.com
Scroll al inicio