Amador Fernández-Savater
http://www.eldiario.es/interferencias/Alain_Badiou-Syriza_6_375922434.html
En esta conversación, la periodista francesa Aude Lancelin y el filósofo Alain Badiou reciben a Stathis Kouvelakis, profesor de filosofía política en el King’s College de Londres y miembro del comité central de Syriza. Su conversación se centra en las complejas negociaciones entre el Banco Central Europeo y Grecia, así como en las raíces históricas de Syriza y las opciones que tiene actualmente el partido.
El resultado es un documento político DE PRIMER ORDEN que repasa todos los dilemas que afrontamos ahora mismo quienes deseamos romper la hegemonía devastadora de las políticas neoliberales en Europa: cómo quebrar la tutela de la troika, cómo romper la máquina infernal de la deuda, cómo evitar que los nuevos gobiernos entren en la pendiente fatal hacia el Estado gestor (PSOE, Mitterrand…), etc. Para Alain Badiou y Stathis Kouvelakis, buena parte de la respuesta a estas preguntas hoy cruciales vendrá de la capacidad de invención de nuevas mediaciones entre los tres términos de la política: acción colectiva o movimientos, organizaciones y Estado. Ninguno de ellos por sí solo es capaz de derrotar hoy por hoy al neoliberalismo, nuevas relaciones entre los tres han de ser tejidas para ello.
Es el desafío y la responsabilidad a la que nos convoca esta conversación. Que se centra en el caso griego, pero interpela muy directamente a la situación en España.
Quizá nunca haya sido tan peligroso el trabajo de un banquero central. Una activista irrumpió este miércoles en la rueda de prensa del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, al grito de «acabemos con la dictadura del BCE». La joven, alemana y de 21 años, según la polícia, consiguió burlar las rigurosas medidas de seguridad de la nueva sede del Eurobanco, un rascacielos situado casi a las afueras de Fráncfort. La protesta «contra los métodos dictatoriales y patriarcales del BCE» fue reivindicada poco después en su página web por el colectivo feminista internacional Femen, que atribuyó la acción a Josephine Markman.
«Las primeras conclusiones sugieren que la activista se acreditó como periodista para un medio al que no representa. Como todos los visitantes en el BCE, pasó el control de identificación y el detector de metales y su bolso pasó por los rayos X antes de entrar en el edificio», explica el BCE en un comunicado. «El presidente del BCE, Mario Draghi, salió ileso y continuó con calma con la rueda de prensa», concluye.
En sus dos últimas visitas a otros países, el consejo de gobierno del BCE ha visto cómo se convocaban manifestaciones de protesta, tanto en Nápoles (Italia) como en Nicosia (Chipre). Ya en enero, una manifestación ante los cuarteles generales del Eurobanco provocó altercados y decenas de detenidos en Fráncfort. Pero esta vez los activistas han ido más lejos y han dado un enorme susto al banquero central, que minutos después ha retomado la rueda de prensa sin parecer afectado por el incidente.
La activista ha logrado encaramarse a la mesa de Draghi y ha lanzado confeti y varias octavillas en las que amenazan al BCE, «master del universo», por «imponer a la gente una narrativa insana y quitarle su dignidad para venderla a los bancos».
La joven se ha limitado a agitar los brazos y a repetir una y otra vez «acabemos con la dictadura del BCE» hasta ser reducida por la seguridad del banco en apenas unos segundos. Pero en su octavilla deja una amenaza para Draghi: «Hoy soy solo una mariposa mandándote un mensaje, pero asústate, volveremos».