Amada lectora o lector, tras leer este resumen, en tu opinión ¿Como es Aiete? ¿Un barrio vital o no vital?
El diseño de los barrios, para que existan zonas que se puedan caminar, influye en los índices de actividad física que realizan las personas mayores de 65 años que residen en ellos, según un estudio elaborado por investigadores del Instituto de Ciencia y Tecnología Ambiental y del Departamento de Geografía de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB). Cuando estos barrios son concurridos y tienen comodidades, sus habitantes son menos sedentarios, caminan más y hacen trayectos más largos que los residentes en zonas más «aisladas» y «poco transitadas».
Para lograr que el barrio incentive a que los ancianos lo caminen, aumentando su actividad física, el diseño urbano es crucial, al igual que la existencia de más servicios y establecimientos comerciales. Según el estudio, dirigido por los investigadores Carmen Miralles y Oriol Marquet, la falta de actividad física es un factor de riesgo clave de padecer obesidad, patologías mentales, problemas cardiovasculares, distintos tipos de cáncer y artritis, responsables del 6% de la mortalidad.
La investigación se basó en una encuesta realizada a 12.000 personas residentes en barrios catalogados como «vitales» (muy transitados con comodidades, instalaciones y servicios cercanos) y «no vitales» ( más aislados, dispersos y poco transitados) de 164 municipios de la Región Metropolitana de Barcelona. Los resultados fueron que el 15,5% de los mayores de 65 años pasa más de un día sin salir de casa, un dato que se amplía al 21,2% en el grupo de los mayores de 75 años con tasas aún más elevadas entre las mujeres mayores (25,5%).
La tipología del entorno urbano, además de la edad y el género, puede influir en el número de desplazamientos de las personas mayores y, por tanto, en los niveles de actividad física realizados durante sus caminatas. La proximidad a los destinos y la presencia de gente paseando por la calle anima a las personas mayores a hacer más salidas de casa, lo que implica caminar más a menudo y durante más minutos que los que viven en zonas no vitales.
Dice el informe que “esta relación directa entre la vitalidad / caminabilidad del barrio y el envejecimiento activo tiene una incidencia más marcada en los hombres de edad avanzada que en las mujeres. En concreto, en los barrios no vitales, el 20% de los hombres mayores de 75 años son personas que no salen de casa, mientras que en los vitales la cifra disminuye hasta el 13%. Del mismo modo, los hombres que viven en zonas consideradas como vitales realizan al día un 11,3% más de viajes que los que residen en áreas más aisladas”.
Los mayores de 65 años que viven en barrios vitales caminan en un 76,7% de sus desplazamientos, una cifra que se reduce al 56,8% en las zonas no vitales. En minutos, los residentes de las zonas vitales han caminado casi 34 minutos más semanales que los otros, y se acercan a la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de andar 30 minutos al día para garantizar un envejecimiento activo y saludable. En cuanto al uso del coche particular, en los vitales lo usa el 10,2%, cifra que aumenta en los otros hasta el 20,3% en el caso los barrios no vitales.
Decís que investigadores de la Universidad Autónoma de Barcelona hablan de la influencia del diseño de los barrios, para que existan zonas que se puedan caminar, y que esta influye en los índices de actividad física que realizan las personas mayores de 65 años -y de menos- que residen en ellos. Dicen también que cuando estos barrios son concurridos y tienen comodidades, sus habitantes caminan más y hacen trayectos más largos que los residentes en zonas malogradas
Para lograr que el barrio incentive a que sea caminado, el diseño urbano es crucial. Y eso es cosa del gobierno, que lo ha dejado abandonado.
Pues bien, respondiendo a la pregunta editorial, Aiete es un barrio muy poco vital, es un más bien un barrio desangelado.
Machado nos recuerda que desde que nacemos buscamos nuestro camino en la vida, alcanzar nuestros sueños y aquello que nos hace felices. En lo que es el paseo de Aiete poco se puede andar y desde luego de atreverse a perseguir sueños, como hacía Don Antonio, nada. Nos quedan nuestros jardines y bosques, ahí si podemos pensar, emprender la marcha, no mirar atrás, y no dejar de caminar…
No es fácil contestar a la pregunta acerca de la vitalidad o no de la ciudadanía en Aiete habida cuenta de que habría que disponer de los datos pertinentes acerca, entre otras cosas, de la movilidad física de los jubilados, la participación en los actos festivos, las visitas a la casa de cultura, la colaboración con la Asociación de Vecinos apoyando las peticiones de la misma , etc.Sin embargo, después de leer ( con envidia sana )el informe de los investigadores catalanes parece pertinente hacerse algunas preguntas: ¿ Existe en el Ayuntamiento algún estudio pormenorizado de los 17 barrios de Donostia que recoja, como iniciativa propia, las necesidades de mejora en los ciudadanos de cada barrio sin tener que nutrirse de lo que las Asociaciones piden permanentemente ?.¿ Existe un equipo en el Ayuntamiento que esa capaz de aportar soluciones a la ordenación urbana motu proprio ? . Se podrían hacer muchas más preguntas pero resulta sorprendente que después de cada elección municipal y durante el mandato, las Asociaciones sigan pidiendo lsoluciones ,por ejemplo, para que la velocidad de los vehículos que transitan por los barrios lsea la adecuada;que los ciudadanos tengan a mano un ambulatorio médico; que la limpieza se haga adecuadamente y un sin número más de cuestiones. Perece que el Ayuntamiento siempre va a la zaga de lo que los ciudadanos piden para mejorar sus condiciones de vida y esto es lo que se entiende por vitalidad en la vida de cada uno. Por último y siendo realista creo que Aite ,entre otras cosas, es el barrio jardin por excelencia de Donostia por sus dos parques: Aite ( espléndido ) y Puio. Sin olvidarnos del futuro Bosque de Miramon que después de mil batallas parece que sale adelante y será un pulmón de vida en el que cualquier ciudadano de la ciudad podrá disfrutar de la naturaleza en toda su extensión.
Richard plantea una cuestión que afecta a la propia razón de existir de las asociaciones de vecinos. Es la siguiente. Estos colectivos de activistas, al vivir en el medio, ven los problemas que tiene el armazón y funcionamiento del barrio, pero no tienen los recursos para resolverlos. Estos están en el gobierno municipal, a su vez elegido por la vecindad, mientras que a las asociaciones no las elige nadie, incluso puede haber barrios con más de una o ninguna asociación, o la que existe no es representativa o se dedica a organizar cursos de cata de vinos.
De esta suerte las asociaciones se convierten en un lobby más, que en función de los intereses de cada grupo municipal, será tenida en cuenta o no.
De tal manera que no sabemos si, por ejemplo, la casa de cultura, el polideportivo, la plaza de Munto, las funciones de Katxola, el ambulatorio, el bosque de Miramón, es consecuencia de la tenacidad de Lantxabe, con el respaldo puntual o masivo de la vecindad, o la conveniencia partidaria de los diferentes grupos municipales que han formado parte del gobierno o de la oposición. Las medallas siempre se las ponen ellos, aunque una vez al año las reparten entre algunos, no se si puedo decir pardillos, porque alguno se molestará.
Los datos ahí están
10 años de ambulatorio
10 años de ascensor
10 años de bosque de Miramón
Y la pregunta ¿Puede algún edil mirar a los ojos a cualquier vecino del barrio de Aiete (o de Amara. o de Alza, o del Antiguo) y responder sin enrojecer a la pregunta de por qué Aiete sigue sin ascensor?
Había un sketch en Vaya Semanita. ¿Cómo ha podido ser elegida de alcaldesa la gitana Amaya? (En la escena, Amaya lleva una cabra atada a la cuerda) y contesta el representante del PNV “Si el partido presenta a la cabra también la votan” (Cualquier partido, no solo el jeltzale, en el lugar que tenga respaldo de masas)
Viene a cuenta toda esta pesimista opinión porque acabo de leer en el periódico que el proyecto del suburbano -metro-, tendrá paradas en Easo, La Concha y Benta Berri, se licitará el año que viene y estará finalizado en 2020. A las alegaciones de Lantxabe ni responder. ¿Pasarán 10 años o una eternidad? hasta que se bajen del burro en el que tan a gusto están