Más allá de los titulares oportunistas ese es el sentido de la “ciudad del peatón” .
Por esta razón llevamos años reclamando al ayuntamiento que proclame el barrio y el paseo de Aieye como “Zona 30”
La Concejala Delegada pudo ver, por ejemplo, que en el paseo de Aiete hay señales de límites de velocidad a 20, 30 y 40 Km/h.
Elevar el paso de peatones en el acceso a la puerta principal de los jardines del palacio tenía el objetivo de limitar la velocidad. De hecho los autobuses, al atravesar dicho paso elevado, debían frenar si superaban los 20 km/h. Al eliminar ese paso elevado, se ha perdido el objetivo de calmar el tráfico, aunque las señal de prohibido a más de 20 km/h sigue ahí. Además, y, esto es importante, en la idea de amansar el tráfico, los autobuses Dbus y G1 son fundamentales y, en ocasiones sucede lo contrario, son estos autobuses son los que circulan por encima de los 50 km/hora y los que han presionado hasta lograr eliminar el paso elevado.
Considerar al paseo de Aiete como carretera de paso, que es como en la práctica está considerado por el gobierno municipal, está en el criterio de considera el barrio como tránsito entre Hernani y el centro de la ciudad y, en general, por el carácter subsidiario que se le da al barrio de Aiete, como zona de urbanizaciones dispersas. Lantxabe propone que el paseo de Aiete se considere como zona 30 y se señale tanto vertical como horizontalmente, -como se ve en la foto- dando prioridad a las bicicletas, y lo hace, para apaciguar el tráfico en el paseo y que la gente que se aproxime al barrio se acostumbre a ver el paseo como una avenida en la que el peatón tiene prioridad, tal y como proclama el programa de gobierno en “la ciudad del peatón”; en definitiva, ganar el de Aiete, como un paseo más de la ciudad de San Sebastián. Por su parte, la falta de bidegorri, obliga a las bicis a circular por el centro de la calzada, y obliga al gobierno a señalar este hecho, como se hace en en otras zonas de la ciudad, como es el caso de Ibaeta o de la calle Easo.