De esta manera se celebra el día internacional del euskera
El objetivo de LANTXABE en KATXOLA, una vez desplazado el ciclo de literatura y cine y otras actividades usuales -teatro, conferencias, etc- al centro cultural, es dar cobijo a lo que entendemos como cultura material de Euskal Herria (Por otra parte ser el centro de interpretación del Bosque de Miramón)
Por albergue de la cultura material en Katxola, entendemos que en el recinto se permita conocer cómo era la vida pasada en el caserío de los distintos grupos humanos que lo componían y, más en concreto, las actividades en torno al mundo de la manzana.
Las fiestas de Aiete abren y cierran el ciclo de la sidra en Katxola. De esta forma la vecindad del barrio y de toda la ciudad -como se demostró el pasado 24 de octubre- ha podido vivir, en directo, una experiencia de lo que estamos llamando cultural material en la elaboración de la sidra.
El pasado 24 de octubre concernía la trituración, maceración y prensado de la manzana. Un mes antes la recolección de la manzana en el antiguo caserío Zabalegi -hoy Ekogune- utilizando los largos palos de balear, las clásicas kizkitzas y cestos. Y este mes se está produciendo la fermentación de la sidra Pasarán unas semanas, el tiempo preciso para que el mosto se convierta en sidra y en Katxola se vivirá la celebración del txotx. Y, finalmente, el embotellado y, con la sidra, las Aieteko Jaiak
Son cuatro actos, un ciclo completo, que tiene sus raíces en el quehacer agrario y artesano en la obtención de sidra, con la característica de que en Katxola se emplean los procedimientos de los inicios del siglo pasado. Y, además, como se hacía antaño, cada acto, cada momento, tiene su propia gran romería: la de la recogida de manzanas en Ekogune (fiestas de Aiete), la de prensado y obtención de mosto (fiesta de la manzana), la del txotx (romería y sagardantza) y de nuevo las fiestas de Aiete.
El gran reto que se nos presentaba a la gente de la asociación, y del barrio, es que el caserío fuera avistado y descubierto como foco de cultura material por los escolares de Aiete, de Amara, profesores, centros educativos, familias: lance superado.
Katxola es, probablemente, el único caserío en Donostia que fabrica sidra como se hacía a principios del siglo pasado, un museo viviente, en el que se exponen no sólo los elementos externos del caserío, la mayoría de ellos trasladados desde el baserri de Munto; sino también la maquinaria artesanal y la tecnología que forma parte de la cultura de nuestros parientes mayores. Katxola es, en Donostia, un pequeño Igartubeiti para el estudio de cómo operaban las personas y grupos en los caserío de hace cien años, utilizando sus utillajes y herramientas y registrando en nuestra retina una imagen realista y fiel del trabajo que se hacía y cómo se hacía, despertando una gran curiosidad entre los pequeños y emoción en los grandes que asisten al evento.
Esto se consigue mediante la participación directa del observador, que por la cercanía con la cosa, pieza o ente observado: el motor, la machaca, las poleas, la prensa, el tolare, la tina, las kupelas, el taller de carpintero, etc, el asistente, infantil o adulto, asume un papel dinámico en esta actividad, mira intruso y preguntón lo que ocurre, pide explicaciones y hace interpretaciones sobre las decisiones y acciones de los encargados de la fábrica, voluntarios de Lantxabe y del barrio.
Los chavales y profesores que vendrán el jueves día 3, recopilarán los datos que observen, los describirán luego en las clases o en casa, de forma detallada y entre todos harán un aula de costumbres, creencias, mitos, genealogías, historia, lengua de nuestros abuelos o tartarabuelos. Esta es la parte que más atrae a la comunidad escolar
Y Katxola, quiere ayudar en la interpretación de la vida de nuestros antepasados y contribuir en la explicación de la historia de Donostia. Además el caserío destaca por su valor artístico, la importancia de su arquitectura, gracias al traslado artístico que hicieron los licenciados Muñoz-Baroja y Jose Gorritxo
Era necesario rescatar y valorar esta cultura material, ya que forma parte de la diversidad de nuestro pueblo y de nuestra historia. Y es eso lo que han entendido, en primera instancia, los educadores de la Comisión de Euskera del Colegio Inglés que con sus chavales de primaria celebrarán la jornada del día 3 en el caserío Katxola, haciéndolo coincidir con el día internacional del euskera.