El parlamento vasco aprobó el año pasado -finales del 2015- unos presupuestos destinados a inversiones de Osakidetza en los que se incluían para el Centro de Salud de Aiete 500.000 euros en el 2016 y 1.500.000 € en el 2017.
Llegar hasta ese punto fue proceso largo, comprometido, vivo y transparente…Tras varios intentos de lograr una parcela para el ambulatorio que correspondía en derecho a la ciudadanía de Aiete, el ayuntamiento, de la mano de su concejal delegado de urbanismo, Ricardo Burutarán, puso a disposición de la vecindad de Aiete dos parcelas para su elección.
Una concejala de la oposición, para oponerse, en este caso al centro de salud, dijo que una de ellas era privada, precisamente la que se votaría mayoritariamente. No contaba con la generosidad de la gente y titulares del Paseo de Aiete 41-43, a quienes se asociaba dicha parcela, ellos dejaron pasar el periodo de alegaciones sin ejercer el derecho de posesión. Este honroso gesto hizo posible que Aiete tenga un lugar idóneo para construir el ambulatorio. (Señalado en el «árbol» de la nueva plaza de Munto)
Tampoco el titular de educación del Gobierno Vasco, en aque momento, parecía estar por la labor. Pero finalmente el compromiso para hacer un centro de salud, en el lugar elegido por la vecindad, llegó a buen puerto.
En febrero el ayuntamiento aprobó del Plan General para el Ambulatorio para un terreno de 757,67 m2, en la que se construirá el centro sanitario fue cedido al Gobierno Vasco.
Desde febrero la responsabilidad está en Osakidetza pero no sabemos nada de lo que están haciendo, en qué momento está el proyecto, ni siquiera si hay proyecto. Una dirección, la del Servicio Vasco de Salud, que fue capaz de venir a la sede Lantxabe, a reunirse con el grupo que promovía el centro sanitario, ahora se ha escondido bajo tierra.
Los mal pensados dicen que aquello fue posible porque estábamos en periodo electoral, concretamente el de las elecciones municipales que ganaría Eneko Goia y que apoyaba la construcción del centro de salud; pero ahora, afirman estos pesimistas, con Rajoy en el trono, sin elecciones en el horizonte, el gobierno vasco se saltará incluso sus propios compromisos presupuestarios.
Puestas las cosas así, parece que no hay más solución que convocar a la vecindad, y que la gente de Aiete decida qué hacer.
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No queda otra
Los 500.000 del 2016 habran ido para Zorrozaurre como los fondos para regenerar Pasaia?