«Ahora nos queda el ambulatorio»
Los mayores también escriben cartas al Olentzero, en ellas hablan de problemas de tráfico, de infraestructuras, de seguridad ciudadana, de necesidades de equipamientos… «Hace dos años nos trajo la promesa de edificio nuevo de la escuela pública que, hoy, es una realidad. El año pasado la promesa de la plaza de Munto, que inauguramos en las fiestas de septiembre. Este año, la concejala de Movilidad se ha comprometido a que el año que viene Mari Domingi subirá en ascensor para el encuentro con el Olentzero», bromean los vecinos, ilusionados con los avances que se están haciendo en un Aiete cada vez más cosmopolita.
Entre los proyectos en marcha, los vecinos verán cómo, para el 19 de enero, las obras en marcha en el Bosque de Miramon estarán ya finalmente terminadas. «Ahora nos queda el ambulatorio», reclaman. Olentzero estará vigilante para que los deseos y voluntades de los vecinos se cumplan.
Ultimo párrafo del artículo de Gorka Larrumbide