Nuestra enhorabuena a Àngels Barceló, es un reconocimiento merecido. Lantxabe ha dedicado el último de sus ciclos al periodismo y la literatura. Nos ilusiona que sea una periodista la protagonista del Tambor de Oro. Se cerró este citado ciclo el pasado 16 de diciembre y tuvimos entre nosotros a una compañera de Àngels, Eva Monente, ambas periodistas de la cadena SER. Buenas periodistas las dos. Eva presentó a unos atentos y curiosos espectadores, Días de Radio, de Wody Allen. Disfrutamos de lo lindo, con su presentación y con la película.
Volviendo a la designación, Àngels Barceló, no estaba propuesta, no tenía firmas que le apoyaran, no formaba parte de ninguna candidatura, pero el Consejo de San Sebastián Turismo se ha sacado de la manga, esta tarde, otorgar el Tambor de Oro a Àngels Barceló, periodista.
Sin duda Àngels destaca por su especial «cercanía y cariño» que siempre muestra por San Sebastián.
Este galardón lo decide el Consejo de Administración de la entidad mercantil San Sebastián Turismo participada al 100 % por capital municipal y sirve para «premiar a las personas, físicas o jurídicas, que como consecuencia de su quehacer diario, por su trayectoria y proyección profesional o por cualquier otra razón, hayan contribuido de forma activa y notoria en la consolidación de una imagen externa positiva y atractiva de la ciudad, ampliando su potencial turístico, posibilitando el conocimiento de la misma, reforzando su proyección externa y fomentando los vínculos de conocimiento y amistad con otros países, ciudades, organismos y personas» y como se reconoce, en este premio, Àngels encaja a la perfección.
Sin embargo, se ponen en cuestión los procedimientos.
El plazo de presentación de las candidaturas a Tambor de Oro concluía el 9 de diciembre.
Se propusieron ocho candidaturas por tres entidades: el Club Atlético San Sebastián, Lacunza Escuela Internacional y DYA Gipuzkoa.
Los candidatos propuestas del Atlético eran la piragüista Maialen Chourraut, el deportista Richard Oribe, la periodista donostiarra y directora de la revista Vogue en México y Latinoamerica, Eva Hughes y el donostiarra Paulino Caballero, persona vinculada durante años al mundo coral.
La propuesta de Lacunza era la propia academia en su 50 aniversario y el periodista y presentador del programa ‘Sinfonía’ de Radio Clásica Martín Llade (Premio Ondas 2016) y la propuesta de DYA Gipuzkoa el forense Francisco Etxeberria y la cantante Amaia Montero.
A estos nombres, dice el reglamento, se le pueden sumar las candidaturas de los grupos municipales o del sector privado que componen el consejo de administración de San Sebastián Turismo, pero ellos no tienen plazo para presentar candidaturas, pueden hacerlo, y así ha sido en esta ocasión, el mismo día de hoy lunes, en que debían tomar la decisión.
Se produce un desequilibrio normativo doloso e inaceptable
No hay proporción entre las consecuencias sociales, culturales, ambientales, festivas, incluso económicas y el órgano no democrático en el que descansa la decisión.
Han celebrado una primera reunión a las 12 del mediodía, en la que han valorado los ocho candidatos conocidos, ¿han añadido el de Àngels Barceló? ¿Quién? ¿Lo sabía Àngels? ¿Quién más lo sabía?
Parece que no se ponen de acuerdo en designar a la periodista y esperan a la reunión de las cinco y anunciarlo después.
Un juego lamentable.
Se da la circunstancia de que sólo tres entidades han propuesto candidaturas: el club Atlético San Sebastián, DYA Gipuzkoa y Lacunza ¿Proceso participativo?
Es el derrumbe de un sortilegio, de una tomadura de pelo a la ciudadanía curiosa…Y como consecuencia de cómo funcionan estos Consejos, la nula participación de la gente en este el juego. Hace dos años 32 entidades propusimos la candidatura del Coro Easo -75 aniversario- y le dieron el tambor a un Michelin 3 estrellas. Es normal que nos cansemos de estos simulacros y pensemos en el día de San Sebastián para disfrutar y pasarlo en grande.
Conclusión: el Tambor de Oro se decide, con bastante alevosía y mucha nocturnidad, a escondidas, entre los grupos de concejales y los lobbies de la ciudad, asociados al sector servicios: “Hostelería” “Transportes, Taxis” “Organizadores de eventos, reuniones e incentivos” “Comercios” “Alojamientos” “Infraestructuras” “Agencias de viajes y de receptivo” “Recursos museísticos, cultura y de ocio” “Otros servicios”, estos sectores tiene un representante cada uno en dichos Consejos, y la ciudadanía no sólo no tiene voto, ni tampoco voz.
Acierten o no con el Tambor, la gente estamos a otra cosa. Y esta vez han acertado. Pero nos queda la pregunta ¿Por qué no informaron desde el 9 de diciembre de esta propuesta, como del resto de las candidaturas?
Quizás no necesitamos que nos lo digan, sabemos por qué. Es un estilo de hacer política que se practica con demasiada frecuencia, casi siempre.
La gente con la que hablo no pone en duda la profesionalidad o la carrera de Àngels Barceló pero no entiende cuál es su relación con lo que significa el Tambor de Oro. La realización de dos programas radiofónicos desde Donostia no parece sea razón suficiente para conceder a nadie dicho galardón, aunque sean desde la casa de cultura de Aiete.
Esta forma de elección pone en evidencia lo que denuncia Lantxabe: es un premio que dan los lobbis de la ciudad muchas veces asociados al PSE, como en este caso
El Tambor de Oro no es un premio de reconocimientos, sino de promoción de la ciudad y en su origen incluso tenía que ser para la gente que no fuera donostiarra.
Gasco dixit, ese recuerdo está bien, pero lo que no vale es decir que el Tambor ha sido promovido “desde el ámbito de la sociedad civil”. La sociedad civil no está representada en el Consejo de Administración de San Sebastián Turismo, sino los representantes del sector servicios de la ciudad.
Lo malo de Gasco es que vive en su propia fantasía y así como confunde las barracas del paseo de Francia con el mercado de Navidad de las ciudades del norte de Europa, fantasea con que la Barceló «si nuestros principales mercados son Cataluña y Madrid, si buscamos un poco la penetración en esos mercados y la consolidación de los mismos, premiar a alguien de los medios de comunicación es interesante».
Àngels Barceló: “Los informativos de las televisiones privadas no dan información, es otra cosa”
Una larga entrevista en profundidad
http://www.jotdown.es/2012/07/angels-barcelo-los-informativos-deque-las-televisiones-privadas-no-dan-informacion-es-otra-cosa/
Por Javier Vizcaíno
Desde el otro lado de la A-8 asisto pasmado al espectáculo del Tamborrazo finalmente desierto. Cualquiera diría que hay una cepa resistente del pernicioso virus de la Capitalidad Cultural Europea teóricamente pasada.
Confieso no entender del todo, aun respetándolos profundamente, los usos y costumbres de la ciudad, especialmente en lo que toca a su fiesta grande. Llego o creo llegar, sin embargo, a la importancia simbólica de la distinción principal. Se comprende, incluso, que la decisión suscite cierta discrepancia. Salvo cuando recaen en la media docena de comodines habituales -que lo son por su genialidad indiscutible o su inanidad absoluta-, los premios no arrastran grandes unanimidades. Pero con la elección de Angels Barceló se rompieron, o eso parece, todos los registros.
Un segundo después de la comunicación inicial se instaló, dentro y fuera de Donostia, una corriente de estupor que dio paso inmediato a una plural expresión de rechazo. Ojo, no exactamente a Angels, contra la que nadie tiene nada personal ni profesional, y que ha acabado siendo víctima del esperpento. Simplemente, no entraba en cabezas de distintas tallas y pelajes el motivo de la designación. Resultaba caprichosa, máxime cuando se conocía una larga lista de personas que acreditan largamente los requisitos, amén de ser figuras sobre las que se diría que cosecharían un amplio consenso.
Me dice un amigo, siempre dispuesto a ver el lado bueno de las cosas, que la rectificación en el pleno implica la victoria de la ciudadanía porque se ha escuchado la voz de la calle. Podría ser, pero seguro que hay formas mejores de hacerlo.
La noticia de que finalmente no ha sido aprobada la concesión del Tambor de Oro en la persona de Àngels Barceló, me llena de estupor y de casi vergüenza. No tengo absolutamente nada ni a favor ni en contra de esta señora, aunque me sorprendió por completo la decisión tomada por el consejo de San Sebastián Turismo y aún mucho más su débil argumentación. Pero haber declarado desierto el premio por incapacidad de llegar a un acuerdo suficiente, además de lesionar la dignidad de Barceló, sujeta a unas polémicas que no se merece, pone de manifiesto la nulidad de nuestros políticos, su pobreza de miras, su incapacidad para un diálogo exitoso, su infantilismo sectario y peores cosas. Se merecen el abucheo general de la ciudadanía por haber dejado a la ciudad a la altura del barro. Por cierto, Àngels Barceló renunció en la noche del martes al Tambor de Oro a la vista de la polémica desatada. Ella sí ha demostrado categoría. Un mensaje: la forma de elección debe cambiar radicalmente, hay que dar la voz a la ciudadanía donostiarra.
La gran bola de luces como síntoma de mal gobierno
No diré que el gobierno hace todo mal, pero se nota que cojea de varios pies. Que si incineradora, que si mercado de Navidad, que si no Tambor de oro… y ahora la gran bola de luces colocada en la plaza Cervantes que les escapa rodando unos metros por el paseo de La Concha. Menos mal que la bola decorativa fue arrastrada por el viento, sobre las 4.00 horas de la madrugada y sobre las 6.00 horas cuando recorrió unos diez metros por el paseo …y si es es a las cuatro y a las seis de la tarde. En su movimiento, la estructura circular de luces arrastró cuatro tamarindos. Dicen los ediles encargados que por suerte, la escultura dedicada a Cervantes que quedaba dentro de la bola luminosa no sufrió desperfectos, pero más suerte tuvimos los donostiarras de no andar a esas hora por el paseo
Joshemari