2 comentarios en “Aupa Erreala! Aupa Joseba Zaldua!”

  1. El grito retumbó en toda la plaza. La fuerza ejercida por los que vivieron el partido en Balaídos, se contagió a los de la plaza Otxanda, Munto Berri, Cuélebre, a todos y cada uno de los seguidores blanquiazules que lo estaban viendo por televisión en estos dos bares y propició un ensordecedor alarido hacia las cinco y 33 minutos de la tarde de ayer, 21 de mayo de 2017. Es grito nos quedará en el recuerdo. Por tanto, hoy no se sorprendan si se encuentran en su puesto de trabajo, en el ascensor o en algún bar, a más de uno sin voz o haciendo gestos porque se han quedado afónicos. La ocasión lo merecía. Porque a las cinco y media, en el Munto Berri, en el Cuélebre, apenas nadie creía en el gol salvador. El tanto del impronunciable danés (Hjulsager), que muchos descubrimos ayer, echó por tierra toda la euforia generada con el gol de Oyarzabal. Un bajonazo. Y lo que es peor: sin casi tiempo para la reacción. Pocos soñaban ya con la clasificación a Europa -sin tener que esperar a la final de Copa- que, sin duda, iba a influir en el análisis de una notable campaña de la Real. Pero ahí estaba Juanmi, ese jugador que parece no saber hacer otra cosa que marcar goles y que ha dado muchos puntos al equipo esta temporada, para poner la cabeza en el momento y el lugar oportuno. Un cabezazo que nos hizo gritar a todos: ¡Goooooooooool!

  2. El Alavés tenía que perder ante el todopoderoso Barça. Furbol es fútbol y el negocio es el negocio (¿Cómo se asignan los árbitros?).
    Empieza a ser un misterio que no se produzca una desbandada general entre el respetable ante tanto descaro (Bueno qué decir de los pperos?)
    ¿Será también porque la afición y los votantes lo permiten? La cosa va por ahí, el hincha y el votante se convierten en cómplices.
    En fútbol cada año, la nueva camiseta del club de nuestros amores, se cobra a un precio mil veces por encima del de coste.
    ¿Y qué hacen los hinchas más forofos o los votantes del pp, más iluminados? Perdonan, minimizan, defiende al ídolo local corrupto o al político de trurno corrupto.
    Qué indignación hirviente, qué rabia infinita, qué sentimiento de frutración …viven las no forofos o no militantes ciegos
    No me gusta ese fútbol, no me gusta ese pp

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