Mañana miércoles, por la mañana, los chavales del Colegio Alemán, encontrarán abiertas las puertas del caserío.
Son jornadas festivas y educativas. Tendrán oportunidad de ampliar sus conocimientos prácticos de cultura material.
Para ello se pondrá en funcionamiento tanto la trituradora de manzana como la prensa; se les mostrará cómo se pesaba la manzana en una balanza, cuál parece ser el origen de la txalaparta y cómo se construía el entramado de vigas en el caserío sin ningún tipo de metal (hasta los clavos son de madera)
La segunda parte de la visita, será más lúdica. Se pondrán en marcha la toca y los bolos, juegos en los que deslumbró Matxain, y también el bote. Tocarán la txalaparta, y competirán en la soka-tira…
Seguro que será una mañana inolvidable para ellos y para los que habitan en el caserío