Un reportaje de Carolina Alonso, de Noticias de Gipuzkoa, firmado el 13 de Octubre del pasado año, empezaba con ‘El recuerdo del bertsolari Manuel Matxain, de cuyo nacimiento se cumplen hoy 100 años, llenó ayer el barrio de Aiete, que le dedicó una jornada de homenaje repleta de actos, en los que no faltaron los familiares del popular vecino del barrio, un hombre polifacético y sencillo, según quienes le conocieron, que compatibilizó su tarea de creación literaria con el deporte. Se ganó la vida trabajando en una fábrica de baldosas, pero también fue un atleta completo así como jugador de bolos y de toka, en los que también destacó. El público abarrotó la casa de cultura de aiete, a la que se trasladaron los actos de homenaje al bertsolari y deportista con motivo de la lluvia’
Y finalizaba con este párrafo:
‘La jornada de ayer podría dejar no solo un recuerdo en la memoria sino también un hito si el Consistorio acepta la colocación de una escultura denominada Toka en los jardines del palacio, en alusión al juego al que fue tan aficionado el bertsolari homenajeado ayer’.
Un año más tarde, el 12 de octubre de 2017, no fue en los jardines, pero en un lugar más apropiado: una pequeña campa entre los jardines y el popular barrio de Etxadi, fue el sitio elegido para ‘sembrar’ la Toka, -obra de Josean Diez de Quevedo, ‘Jadiku’- coincidente con la idea que tenemos de la sencillez de Manuel y su carácter como ‘gizon plaza’.
La Toka ennoblece la, hasta ayer, anónima verde parcela.