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El Dr. Martin Luther King Jr.
Posiblemente el más famoso afroamericano de todos los tiempos, y uno de los estadounidenses más influyentes con independencia de su raza, el Dr. Martin Luther King, Jr. es sinónimo del movimiento pro-derechos civiles. Su fama aumentó tras el boicot a los autobuses de Montgomery, lo que supuso un golpe decisivo contra la segregación. Martin Luther King, orador carismático, inspiró a una nación con su «I Have a Dream» en su discurso pronunciado durante la histórica marcha de 1963 en Washington, una de las más importantes celebradas en el Memorial de Lincoln.
Reconocido como líder internacional de los derechos humanos, Martin Luther King recibió el Premio Nobel de la Paz en 1964, convirtiéndose en su más joven receptor. Su asesinato, el 4 de abril 1968 en Memphis, donde había viajado para apoyar la huelga de los trabajadores de recogida de basuras, sacudió a la nación, levantando numerosas ciudades en auténtica situación de violencia.
No dispuesta a dejar que el legado de su marido muriera con él, Coretta Scott King creó de inmediato el Centro King, cerca de la casa natal de su marido en Atlanta, e incansablemente hizo campaña durante décadas para conseguir una Fiesta Nacional en honor a su marido.
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Barack Obama
Cuando Barack Obama fue elegido el primer presidente afroamericano de los Estados Unidos en noviembre de 2008, «nunca en mi vida» era el estribillo popular, especialmente entre los mayores afroamericanos del sur de Jim Crow que recordaban los abuelos que habían sido esclavizados. El mestizaje racial de Obama (padre keniano, madre del Mid West blanco), y su trayectoria tanto académica y política desde la Ivy League de la Universidad de Columbia, y la Facultad de Derecho en Harvard, el activismo comunitario en duras condiciones en el South Side de Chicago, senador por Illinois y los Estados Unidos, le convirtió en el único líder cualificado para guiar a la nación en este Siglo XXI, multirracial y global.
Involucrar a los jóvenes, Obama, en gran medida con la asistencia de medios de comunicación social, ha hecho que «Yes, we can» sea algo más que el lema de su campaña. El “Sí se puede” del 15M. Aún así, el presidente, su esposa Michelle y sus hijas Malia y Sasha, representan los afroamericanos cada día mejor.
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Malcolm X
Nacido en una familia del Medio Oeste, liderada por un predicador baptista partidario de Marcus Garvey, Malcolm X experimentó la supremacía blanca antes de cumplir los siete años de edad, tras el brutal asesinato de su padre. Tras una condena por abandonar el instituto, Malcolm se convirtió en el salvavidas para los afroamericanos que abrazaron las enseñanzas del líder musulmán Elijah Muhammad acerca del poder negro y la autosuficiencia. Desafiando el racismo sistemático del país como portavoz del NOI, el propio atractivo popular de Malcolm X incrementó el número de miembros de 500 en 1952, a 30.000 en 1963. Haciendo frente a la hipocresía de Muhammad, Malcolm X salió de la NOI, después de rezar en La Meca junto a musulmanes de todas las razas, denunció su propio discurso del separatismo negro.
Su asesinato en 1965 por miembros del NOI, perseguido también por el FBI, no acabó con su legado. Casi 50 años más tarde, su mensaje hacer del poder negro y su liberación sigue vivo en sus discursos, escritos, y en el best-seller “The Autobiography of Malcolm X”.
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Frederick Douglass
Pocos líderes afroamericanos célebres hay que pudieran hablar con tanta autoridad acerca de la esclavitud y la libertad, como Frederick Douglass. Un esclavo fugitivo y abolicionista acérrimo, cuya novela publicada en 1845, Narrative of the Life of Frederick Douglass, an American Slave, sigue siendo una de las narraciones de esclavos más significativa de todos los tiempos. Orador dotado, Douglass habló en contra de la esclavitud en los Estados Unidos y en el extranjero. Como editor de varios periódicos, incluyendo el más conocido, The North Star, Douglass fue de los primeros defensores de la prensa afro-americana y un firme creyente en la educación y la palabra escrita.
A diferencia de muchos de su tiempo, su concepto de igualdad se extendió también a las mujeres, convirtiéndose en uno de los más prominentes partidarios de los derechos de las mujeres en el país. Tras la Guerra civil, Douglass ocupó varios cargos políticos, entre ellos el presidente de la Caja de Ahorros de Freedman, Encargado de Negocios de la República Dominicana, US Marshall y Cónsul general de Haití.
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Harriet Tubman
Sin lugar a dudas, Harriet Trubman es la esclava fugitiva más célebre, cuya valentía y abnegación han inspirado a generaciones desde antaño. Nacida esclava en Maryland alrededor de 1820, Tubman se convirtió en una niña enfermiza. Sus ataques epilépticos no silenciaron su sed de libertad. Y aunque ella misma escapó con éxito a Filadelfia en 1849, Tubman no se contentó con conseguir su propia libertad.
Apodada el Moisés de su pueblo, Tubman desafió las recompensas que pesaban sobre su cabeza, y recorrió desde el Norte al peligroso Sur durante más de una década, para llevar a otros esclavos la libertad. Según cuenta la leyenda, blandiendo una pistola, se convirtió en la motivación de todos esclavos temerosos para mantenerlos firmes en la idea de la libertad. Durante la Guerra Civil, Tubman no cejó en su empeño, tal y como está documentado, sirviendo tanto como enfermera, o espía. Y, después de ello, se convertiría en una firme defensora del sufragio femenino.
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Rosa Parks
Tal vez la mujer más famosa de la era moderna en Derechos Civiles, Rosa Parks poseía un coraje y valentía tranquilas que, literalmente, encendían la lucha. Negándose a ceder su asiento de autobús aquél 1 de diciembre de 1955 para acomodar a un pasajero blanco, Parks fue arrestada y retenida. Ciudadana ejemplar, así como miembro con carnet de la NAACP, incluso sirvió como secretaria del capítulo de Montgomery, Parks ayudó a inspirar a sus conciudadanos para boicotear los autobuses de la ciudad, haciendo que el boicot de autobuses de Montgomery, que descubrió al mundo la figura del Dr. Martin Luther King, Jr., y la segregación en el transporte público, se convirtiera en un capítulo fundamental en la lucha de la era moderna por la libertad y la igualdad.
Después de mudarse a Detroit, Parks trabajó para el congresista John Conyers durante muchos años, así como el apoyo de Planned Parenthood. Antes de su muerte en 2005, fue co-fundadora de la Rosa L. Parks Scholarship Foundation y de la Rosa and Raymond Parks Institute for Self Development, destinadas a ayudar a los jóvenes.
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Ida B. Wells-Barnett
Célebre por su cruzada incansable contra los linchamientos, Ida B. Wells-Barnett fue la autora de los panfletos titulados Southern Horrors: Lynch Law in All Its Phases y A Red Record, 1892–1894, y negándose a inclinarse ante la supremacía blanca, incluso llegó a demandar al ferrocarril para exigir que renunciara a su asiento en 1884. Como hija de Mississippi, Wells-Barnett, trabajó en Memphis durante la década de 1880, y a principios de 1890, dejó su trabajo como educadora para dirigir el periódico Free Speech and Headlight del que era propietaria parcialmente.
Cuando tres amigos suyos fueron linchados, hizo de su periódico una vía para exhortar a los afro-amaericanos de Memphis para reubicarse, pero se vió obligada a trasladarse a Chicago. El matrimonio y la maternidad ralentizaron su activismo político, pero no lograron extinguir su pasión por la justicia. Fue una de los pocos afroamericanos que siempre decía lo que pensaba, Wells-Barnett se opuso al discurso de Booker T. Washington en 1895 en el Compromiso de Atlanta e inmediatamente se alejó de la NAACP, aunque participara en su fundación. Como mujer, Wells-Barnett apoyó los derechos de las mujeres afro-americanas y el sufragio femenino.
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James Baldwin
A menudo reconocido como el hijo literario de Richard Wright, James Baldwin fue un escritor afroamericano abiertamente gay, una novedad en su tiempo. Su primera novela, Go Tell It on the Mountain, publicado en 1953, exploró el tema religioso y homoerótico. Como ensayista, la primera colección de Baldwin, Notes of a native son, apareció en 1955. Explorando temas de identidad racial, identidad nacional e identidad sexual, la norma para Baldwin era esforzarse conscientemente para dar sentido a su tiempo.
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WEB DuBois
Quizás el intelectual afroamericano más renombrado de todo el país, WEB DuBois nos dejó sentir su impronta en todos los frentes. Sus primeros trabajos, como su tesis doctoral “La represión de la trata de esclavos africanos en América”, o sus obras “The Philadelphia Nigro” y “Black Reconstruction”, establecieron un estándar para la comunidad académica afroamericana.
Su legado como profesor, activista político, académico prolífico e intelectual público sigue siendo inigualable.
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Paul Robeson
Paul Robeson fue como un hombre del Renacimiento. Atleta universitario All-American, miembro de Pi Beta Kappa en Rutgers, y se graduó como abogado, al mismo tiempo que su carrera despegaba. Entre sus muchas contribuciones, actuó en espirituales negros, y en numerosos conciertos con un gran éxito de crítica. Estrella de cine también durante los años 20, Robeson apareció en películas como la de Oscar Micheaux de 1925 Body and Soul, pero quizás sea más conocido por la película The Emperor Jones, realizada completamente con actores negros, así como la producción de Hollywood Show Boat.
Co-fundador del Comité Internacional sobre los Asuntos africanos (1937), Robeson fue un viajero muy involucrado en la política mundial. En los Estados Unidos, prestó su imagen de estrella para numerosas cuestiones de derechos civiles, entre ellas la cruzada contra el linchamiento. Su negativa a firmar una declaración jurada declarando que no era comunista, hizo de él uno de los más famosos estadounidenses llamados a declarar por el Comité de Actividades Antiamericanas.