El 26 de febrero de 1999 el Ayto de Donostia autorizaba el traslado del caserío Katxola situado en el borde del paseo de Oriamendi a su actual emplazamiento, calle Paraiso s/n
El 9 de julio de 1996, el Gobierno Vasco calificaba al caserío como Bien Cultural con la categoría de Monumento por Decreto 169/1996 (B.O.P.V. nº 141 de 23-07-96), con la posibilidad del traslado de Katxola a otro lugar, si fuera necesario
La solicitud para ser declarado ‘Monumento’, con las consecuencias de no poder ser derribado, es iniciativa de Lucia Erdozia (con el visto bueno de la Kutxa) y el apoyo de más de mil firmas de gente del barrio (Lucia es nacida en el caserío).
Formalmente se define a Katxola como “Caserío desmontado y reconstruido doscientos metros al norte de su ubicación original en la loma de Oriamendi. De reducida planta, su ocupación no llega a los 200 m2, se compone de planta baja, primera y un bajo cubierta a dos aguas. Su estructura se divide en tres crujías perpendiculares a la fachada principal con cuatro vanos desiguales debido a la diferencia de usos entre la parte anterior dedicada a vivienda y la posterior para la actividades agropecuarias. Este área posterior del caserío está ocupada por el lagar, desde el bajo cubierta destinado al almacén de la manzana, en la primera planta se encuentra la prensa y en la planta baja la recogida del mosto. Sus muros son de mampostería revocada con sillares en recercados de huecos y encadenados de esquina, entre los que destacan los flancos de la fachada principal con muros adelantados para cortavientos. Los dos niveles superiores de la fachada principal están construidos con un entramado de madera”.
El 29 de noviembre de 1999 se inició el traslado que culminó en Diciembre de 2000.
Los arquitectos responsables del traslado fueron Jose Gorritxo y Muñoz-Baroja
La empresa que hizo el traslado construcciones Trati sl y su responsable Javier Arruti (facilitador de las fotos)
(Se eligen los materiales y cosas a trasladar, se hace la prospección arqueológica, se eligen las tablas del suelo para su utilización posterior, se quitan y desechan las paredes y tablas de las habitaciones, se suelta todo el lagar y se desecha todo lo inservible, se retiran y guardan las tajas válidas, se numeran las piedras de los dinteles así como las columnas y vigas de madera, se tiran las paredes de manpostería sin valor, se numerar y guardar todos los elementos susceptibles de utilización posterior. El caserío quedó como un esqueleto)
(Se trasladaron sus 364,40 m², sin ningún añadido, al terreno destinado a equipamientos sociales (sito en C/ Paraíso), se realizó el proyecto de seguridad e higiene y de desratización y de saneamientos, pero no el proyecto de cierre de agua y electricidad como estaba previsto)
(En la construcción del nuevo edificio se plantan los cimientos y un nuevo sótano que no tenía el edifico original; se levantan las nuevas paredes de manposteria en la primera planta y se colocan los viejos dinteles asi como los postes sobre pilastras; se empieza por la parte Norte-Oeste y después por la parte Este-Sur, desde sótano a primera planta; en la planta baja se coloca suelo radiante, se va colocando el lagar y los postes y vigas viejas, se suben las paredes y dinteles a 2ª planta y desván; se coloca el suelo de la 1º planta y la escalera; se pone solo el suelo de la parte sur de la gambara dejando el resto abierto hasta el tejado para que se vea como es la bella construcción; se termina con el tejado)
El 10 de abril de 2001 el Ayto concede la licencia de primera utilización
En noviembre de 2002 el ayuntamiento cede el caserío Katxola a Lantxabe para su uso.
Tras un periodo de adecuación del caserío, puesto que la Kutxa decide abandonar el proyecto sin finalizarlo del todo, con la generosa colaboración de técnicos del ayuntamiento y del museo de San Telmo, se procede, en este caso ya por la iniciativa de Lantxabe, a la toma de agua corriente e instalación eléctrica
El primer año de usufructo de Lantxabe se da una exposición de Agenda XXI, y en las fiestas de Septiembre 2003, se exponen fotografías del Aiete entre los años 1900 y 1980, en la planta baja y primera planta, y en el sótano se exponen grandes dibujos sobre el proyecto de parque etnográfico en Miramón.
El resto de la historia se puede seguir en estas mismas páginas