Hace casi seis meses, el pasado14 julio, Lantxabe se hizo eco de esta lamentable situación de esta calle.
Es una calle semipeatonal, pero en la que abundan los garajes, conviviendo coches y familias, que llevan o traen sus niñas o niños a cualquiera de los cinco colegios que la rodean. (En el mapa de Google el colegio inglés queda fuera, a la derecha)
Es también una forma de acceso que tienen las alumnas y alumnos de estos colegios al caserío Katxola, sin tener que recorrer el paseo de Oriamendi, en el que se circula a gran velocidad (’la carretera de Hernani’).
Los criterios del gobierno de la ciudad sobre el ejercicio de prioridades en mantenimiento urbano: “primero las zonas mas frecuentadas”, tienen como consecuencia el abandono de los barrios y la denuncia de Iñaki
Iñaki invita a la policía municipal y Lantxabe a los ediles de la ciudad, a que se den un paseo por la zona a la hora de entrada o salida de los colegios.
De hecho, la velocidad máxima permitida en esta carretera no es 30 sino 20 km/h como seaprecia en la señalización vertical a la entrada de la misma.
Es una vergüenza cómo está la calle Mantulene, no hay una zona para peatones y tenemos que compartir la calle con los coches, siendo esta calle de tránsito hacia centros escolares como el Axular Lizeoa o Aiete Ikastetxea. Cada día, al ir al colegio con mis hijos, tengo que aguantar cómo nos pasan los coches, literalmente rozándonos y a toda velocidad. Hasta que no nos lleven por delante, porque sustos hemos tenido muchos, no lo arreglarán.
Y siguen sin arreglar el desastre de esta calle, no hay acera, los coches te pasan rozando a toda velocidad, si vas por el medio para que no te atropellen te la juegas a tener que discutir con los coches que no se saben lo que significa la señal s-28. A ver si el alcalde se digna y pone una acera como tiene que ser, que no es normal que te la juegues todos los dias para ir al colegio con tus hijos.