Como se recordaba ayer, el 9 de noviembre 2011 se celebró, en el caserío Katxola, la primera sesión decisoria sobre el Bosque de Miramón
Muchas personas, vecinas del barrio, gente de representación y expertos, acudieron a la cita. Entres ellas una familia, con un hijo, Pedro, de la Calle Erramunene (ahora tendrá 17 años); traía por escrito su propuesta para el Parque (Su ama propuso cambiar el nombre, no llamar Parque a lo que era Bosque y Parque Tecnológico al mundo empresarial)
Y así se quedó, todo el mundo llama Bosque de Miramón o Miramon Basoa, al área natural del pulmón más importante de la ciudad. Y que sea por muchos años, con el riesgo que supone tener en su seno a la temida y ambiciosa área empresarial, tan influyente en el gobierno municipal [157 Empresas; 140 Millones de euros de inversión empresarial en I+D; 1191 Millones de € de facturación; 506 Patentes; 5263 empleadas/os; 52% Tituladas/os superiores, 12% Doctores/as; 13% Menores de 30 años].
Pedro trajo propuestas
- Hacer tirolinas en el Bosque
- Sencillos columpios en los árboles
- Algunos puentes sobre las errekas
- Toboganes hechos en piedra
Pedro se imaginaba un bosque encantado, cuyo tesoro son los árboles, las errekas y el estanque. Propuso crear condiciones de habitabilidad para las aves y anfibios que hoy figuran en la mesa guía de la alberca; en este pequeño embalse se puede ver revoloteando al martín pescador y a algunos patos nadando, con cuidado de no ser víctimas de las rapaces que merodean la zona
Hoy el senderista se puede encontrar con aves como los carbonero común y garrapinos, los herrerillo común y capuchino, el trepador azul, el petirrojo, los colirrojo tizón y real, el autillo, agateador, el arrendajo, que avisa con su potente canto de la presencia extraña en el bosque, o con el prodigioso ruiseñor que canta de día y de noche; pero la noche es el reino del cárabo, rapaz nocturna de bonito porte, cuyo sonido en la oscuridad recuerda a un lamento. Y descubrir también refugios para pequeños mamíferos que lo habitan como el el erizo o el lirón gris, nidos específicos en el caso del murciélago; nos encontraremos también con la abundante ardilla.
Ahora se nos anuncia un parque de tirolinas al calor del boom turístico en San Sebastián y del auge de las nuevas formas de ocio. Se va a hacer en el Monte Igeldo, enclave singular, tras la aprobación de un Plan Especial de Ordenación Urbana.
Un Plan Especial de Ordenación Urbana para hacer tirolinas en Igeldo, un Plan Especial de Ordenación Urbana para propiciar la construcción de empresas en el Parque Tecnológico de Miramón.
El Gobierno Municipal no aprobó que se hicieran tirolineas en el Bosque de Miramón como si no hubiera enclaves suficientes, vaguadas, diferentes zona atravesadas por las errekas; pero sí ha aprobado la modificación del Plan Especial de 2004, para poder subdividir parcelas, trasvasar la edificabilidad de unas a otras, flexibilizar la normativa para autorizar nuevas entradas a las empresas y facilitar el acceso con el coche tanto desde el vial superior como del inferior. También, para instalar equipamientos deportivos, habilitar un parking en rotación de uso público o levantar un edificio de 10 plantas en una de las rotondas de entrada al parque.
La justicia distributiva es, desde los tiempos de Aristóteles, lo justo o correcto respecto a la asignación de bienes en una sociedad. Los principios de la justicia distributiva son principios normativos diseñados para guiar la asignación de los beneficios y las cargas de la actividad económica. Los jóvenes usuarios del Bosque de Miramón tienen derecho a disponer de sus tirolíneas, pero el gobierno les niega ese privilegio
La empresa de Adolfo Muriel, -propietario del restaurante Alaia y la cafetería Chez Croissant-, sí lo tiene, puede implantar sus tirolineas en el Monte Igeldo y explica que va a ser una atracción para toda la familia, con dieciocho tramos, el más largo, de ochenta metros de longitud. El recorrido, nos dice la empresa, es apto para mayores de nueve años.
Pedro hacía su propuesta con esa edad.
Los tirolíneas de Pedro eran gratis, los de la empresa de Igeldo, precio único de la entrada individual 18 euros (grupos, etc, tendrán descuentos)
El poder vulnera la justicia distributiva, una y otra vez, desde los tiempos de Aristóteles.
El bosque de Miramón está muy bien como está sin convertirlo en un parque temático. No nos hacen falta turistas en Miramón.
Sin Pedro y su ama no existiría “El Bosque” de Miramón. Aun hoy en día la administración municipal le sigue llamando Parque; es un asunto semántico, pero muchos pensamos que existen ciertas reticencias a que el Bosque tenga el trato de reserva ambiental y que se alejen las tentaciones, ya no de convertirlo en parque temático y turístico, sino de arruinarlo y construir en él una zona de expansión industrial.
Nos costó mucho lograr que el Bosque sea tenido como un pulmón verde de la ciudad, que se cuidara, limpiara, arreglara, para que los senderistas y los paseantes puedan disfrutar de él.
La cita de ‘tirolíneas’ es un homenaje a Pedro, y a todas aquellas personas que se comprometieron y siguen comprometiéndose con el espacio natural de Miramón
Pretende enfrentar al gobierno municipal con sus contradicciones y servidumbres a los medios empresariales; lo fácil que les resulta modificar el PGOU, para ellos, y lo imposible que es atender las sugerencias ciudadanas.
Nadie más interesado que estas personas que acompañan a Lantxabe en mantener el Bosque como es, y no convertirlo en un jardín.
Una última consideración, que guió el proyecto, y que fue debatido ampliamente y aprobado: el Bosque debe ser visible y utilizable por el mayor número de personas, no es exclusivo para avezados e intrépidos excursionistas