La asociación de vecinos Lantxabe pide una investigación al ayuntamiento
Una de las cuatro esculturas de Josean Díez de Quevedo Jadiku expuestas desde el pasado jueves en los jardines de Aiete apareció ayer pintarrajeada. La obra forma parte de una muestra del escultor donostiarra y se desarrolla con cuatro piezas grandes en el exterior del Topaleku y numerosas de pequeño formato en el interior del recinto. Las esculturas exteriores están dedicadas a las amonas y los aitonas y su sufrimiento durante la pandemia.
Miembros de la asociación de vecinos Lantxabe mostraron ayer su malestar por la actitud de quienes habían malogrado la creación escultórica. «Con dicho trabajo de consideración y honra, el escultor expresa sus ideas de respeto a estos sufridos hombres y mujeres«, recalcaron para criticar la acción de los gamberros.
Vecinos del barrio han solicitado que se abra una investigación sobre «este grupo de golfos, que se mueve con impunidad» y ha actuado en la plaza de Munto, en el funicular de Morlans, en la marquesina de Etxadi y en los semáforos del paseo de Aiete. «Pero el concejal delegado nos dice que no se pueden poner cámaras porque atentaría contra los derechos de los ciudadanos en un espacio público y tampoco puede haber patrullas vigilando día y noche», explican.
El escultor Jadiku cuenta con otra escultura en Aiete titulada Toka, en homenaje al campeón de toka, bertsolari, poeta, korrikalari y bolari Manuel Matxain. No está dedicada al pelotari Miguel Gallastegi, como informamos ayer por error.