‘Aiete se vuelca en su Casa de Cultura’.
Así titulaba la entrada en la web con fecha 31 diciembre 2010. 10 años hace
Recorbadámos en aquella ocasión que fue la propuesta más votada en una asamblea celebrada en el viejo Topaleku, allá por el año 2004 y a la que asistieron un centenar de vecinos. Fue en el marco de unos “presupuestos participativos” y se propuso a votación entre otras 10 prioridades.
El texto que se votó, casi por unanimidad, fue “Casa de Cultura en el Palacio de Ayete”, frente a las propuestas del ayuntamiento de que se construyera en la vaguada de Lanberri. Tuvimos fe, luchamos contra viento y marea, y ahí está la esplendida Casa de Cultura. Aiete salió ganando, la cultura salió ganando, Donostia salió ganando. Contra pronósticos agoreros o más negativos, el primer día la biblioteca registró 113 socios nuevos y a la casa de cultura acudieron cientos de vecinas y vecinos de todas las edades.
Pero antes hubo que pelear
Poco después se convocaría una asamblea para toda la vecindad en el Palacio de Aiete
Fueron cuatro años, entre este 2006 y finales del 2010, de mucho ajetreo, con zancadillas por todos los lados, pero la Casa de Cultura de Aiete fue la sensación de las Navidades 2010-2011. Era un ir y venir de curiosos que, aprovechando las vacaciones, coincidieron en acercarse al recinto situado bajo el Palacio de Aiete. «El barrio necesitaba algo así». Era la frase más pronunciada y la conclusión más clara que sacaban los que tuvieron la oportunidad de ver las instalaciones del recinto cultural.
El sentido de estas frases enfáticas se lo daba el escepticismo de algunos técnicos municipales que desconfiaban del propio barrio ‘alargado y sin centralidad’ y -como de dice más arriba- los obstáculos que hubieron de superarse y que corrían a cargo de un amplio abanico de ‘autoridades políticas y culturales’ (instituciones y organismos de diversa trascendencia, gobierno vasco, departamentos del gobierno central)
Hoy celebramos el 10 aniversario, pero abrimos un ‘hilo’ en el que recordaremos que no todos ‘remaron a favor’ -y muchos en contra- de la bellísima, extraordinaria Casa de Cultura en Aiete que tiene Donostia
Nos pidió el concejal de cultura que trasladáramos ‘el Ciclo de Literatura y Cine’ que reuníamos en el Topaleku, al Centro Cultural y así se hizo, con mucho gusto, por parte de su organizadora Lola Arrieta, muy activa, como toda la directiva de Lantxabe, en la tarea de “Casa de Cultura en el Palacio de Ayete”
El Jueves 13 de Enero, de aquel 2011, se celebraba la tertulia literaria sobre La princesa de Cleves de Madame de Lafayette y, el Viernes 14, se proyectaba la película La carta de Manuel de Oliveira, en Versión Original Subtitulada, como durante todo el ciclo.
Pensábamos que Aiete estaba pasando de ser un barrio dormitorio, como lo denominando muchos, a ser un referente de cultura, paz y derechos humanos, gracias -entre otras razones- a la construcción de la Casa de Cultura y al destino ciudadano del palacio de Aiete
En aquella entrada ya proponíamos que el horario de apertura al público, por la tarde, desde las 16.00 hasta las 20.30; martes, miércoles, jueves y viernes, sábado todo el día, y domingo por la mañana, pasara a abrir también por las mañanas. Hasta hoy.