Estamos viviendo un sueño, quizás no le suceda a toda la vecindad de Aiete -ya hay algunas quejas-, pero la mayoría se frota los ojos. Esa mayoría es la que ha hecho posible que hoy el barrio tenga un centro de salud.
La gente ha visto crecer el edificio, ha sido una gestación larga y difícil, al aire libre, con la terrible plaga del covid19 al acecho y muchas dificultades técnicas para hacer bien el trabajo, pero ahí está, bello, deslumbrante, lleno de vida y de gente que vela por la vida
¡Ongi etorri!
El ambiente es de pesadilla, de ensueño angustioso, de preocupación por la amenaza epidémica del coronavirus, con olas de contagios que afecta a toda actividad humana.
El edifico ambulatorio ha avenido a ayudar cuando más se le necesita
El centro de salud de Aiete está en marcha.
El nuevo ambulatorio de Aiete está funcionando desde el martes 12.
En el barrio hay mucha expectación
Han visto crecer el ambulatorio en una parcela muy complicada, las obras han durado casi dos años, es un edificio muy bello, muy blanco
La vecindad se está acercando al centro de salud, tramita la carta que ha recibido en su domicilio, se le asigna facultativa o facultativo, horarios, con los cuidados propios del coronavirus.
Al conjunto del grupo sanitario le sobraba el «mamotreto» eléctrico. Desde el principio de la obra -hace casi dos años- los responsables de la construcción se pudieron en contacto con Iberdrola, propietaria del cachivache, parece que el transformador ya ha sido reubicado, pero los restos seguían todavía ahí…hasta que se ha hecho saber que venía una alta autoridad a la inauguración, y como suele pasar, de la noche a la mañana, literal, ha desaparecido el armatoste. Todo esto es bienvenido
Lo más importante es que el ambulatorio de Aiete permite que los residentes en el barrio, que hasta el momento estaban divididos entre los centros de salud de Amara Berri y Ondarreta, tengan su propio centro de salud.
Este servicio sanitario ayuda, además, a desviar pacientes de los ambulatorios vecinos y permite una acción más racional contra el covid 19. Es un buen servicio para Aiete pero ahora, especialmente, para la ciudad en su conjunto.
La vecindad disculpa los retrasos, asume el precio que se paga en estas situaciones extremas, y agradece el esfuerzo de los trabajadores: de los que han hecho posible el edificio ambulatorio y de los que han empezado a prestar sus servicios en él
Queremos recordar y agradecer a
Olatz Olano, gerente de Oskidetza en Guipúzcoa en el año 2006, que desde aquellas fechas y desde el primer día, nos acompañó en la reivindicación de que la vecindad de Aiete tenía necesidad y derecho a un centro de salud.
Los empleados que prestan su servicio desde el martes en el centro de salud de Aiete y anteriormente en Amara o el Antiguo
Los trabajadores de buzo de la edificación, que han cumplido sus jornadas laborales, incluida la época de ‘estado de alarma’
A la dirección de obra, arquitectos, especialistas, delineantes que, no sin problemas, contrariedades, escollos, han llegado hasta el final
A los vecinos del paseo de Aiete 41 y 43. La parcela sobre la que se construye el ambulatorio no había sido ‘recibida’ por patrimonio municipal, pero, no presentaron pleito por lo que gracias a ello la obra pudo comenzar en fecha.
Al ‘Grupo de Impulso del Centro de Salud en Aiete’ que ha tenido una importancia decisiva para lograr el centro de salud del barrio.
El miércoles 13 de mayo de 2015, a las cuatro de la tarde, en el Topaleku (sede vecinal), se celebró una reunión con una Delegación del Gobierno Vasco. Asistieron
Jon Etxeberria, Director General de Osakidetza
Eneko Zarraoa Garmendia, Subdirector Obras y Servicios Estratégicos de
Osakidetza
Y una delegación de dicho grupo de impulso
● Mikel Azkue, médico de Osakidetza (recientemente jubilado)
● Enrique Etxeburua, Catedrático de Psicología Clínica
● Mª Jesus Legorburu, Directora de la escuela pública Aiete Ikastetxea
● José Luis Segurola, Asociación Cultural Deportiva de Aiete
● Juan Carlos Berzosa, Asociación de Jubilados Goiko Galtzara
● Telmo Sexmilo, joven colaborador
● Félix Pérez, Asociación de Vecinos Lantxabe
En esa reunión se pusieron las bases y se creó el compromiso de seguir adelante con el ambulatorio. Los directivos citados de Osakidetza se emplearon a fondo
Ha sido la vecindad de Aiete, con su impulso y determinación, la protagonista de este nuevo equipamiento esencial para el barrio (Es ilustrativo de la dejadez administrativa municipal el que haya tenido que ser la vecindad quién vaya haciendo un barrio ‘civilizatorio’ -casa de cultura, escuela pública, polideportivo, plaza y museo de Munto, ascensor vertical y bidegorri, etc- después de que las inmobiliarias hayan campado por sus respetos, construyendo a troche y moche, sin criterio urbano alguno)
El ambulatorio de Aiete ha sido fraguado durante años. El punto de inflexión fue la asamblea celebrada en la sala Pagoa del Topaleku, tuvo lugar el 25 de marzo de 2015. Allí se votó por la parcela actual a mano alzada, como se ve en la foto, pero en esta web participaron cientos de vecinos votando en la misma dirección.
Se reunió en asamblea una parte de la vecindad de Aiete para debatir y decidir sobre una de las dos parcelas propuestas por el Ayuntamiento para la construcción del centro de salud. A la reunión asistieron el concejal delegado de Urbanismo, Ricardo Burutaran, junto a uno de sus asesores, y otras 73 personas, representantes vecinales, comunitarios y profesionales. Fue el propio edil quien aclaró que cualquiera de las dos parcelas propuestas exigen de una normalización de la finca (plan parcial, intervenciones urbanísticas, negociaciones con la vecindad más próxima…) y el visto bueno de Osakidetza, tanto desde el punto de vista de ubicación, metraje, adaptabilidad a los servicios concretos que el barrio necesita.
Después, hasta hoy, se hubieran de sortear diversos obstáculos, impedimentos, inconvenientes, conflictos.
En ocasiones hemos encontrado en los responsables públicos alguna dejadez, pasividad, indiferencia, desinterés, insensibilidad (Como tener guardado en el cajón, durante un año, el permiso de edificabilidad)
En la web se puede consultar la tortuosa trayectoria seguida, punto por punto, hasta llegar a la realidad actual.
‘Pero bien está lo que bien acaba’. Tenemos centro de salud, recordamos de nuevo a los citados más arriba y le damos las gracias también a Osakidetza, al alcalde, Eneko Goia, y a los ediles que le precedieron, como Ricardo Burutarán, a responsables de Osakidetza como Eneko Zarraoa, y a los técnicos y abogados municipales; los problemas que ha habido que enfrentar son historia.
El ambulatorio es un hito de la vecindad de Aiete
Veremos con el tiempo, pero que va a pasar cuando la gente llegue y vea que no hay sitio donde aparcar
uuuuf ,……lo de acudir en coche es a reducir casi se diría que a eliminar , cada 10-15 minutos en los dos sentidos hay buses, con parada prevista en el aparcamiento justo frente a la entrada y en caso necesario se puede parar el vehículo el tiempo para bajar el asistente a consulta por su propio pie o con silla de ruedas , pero aparcamiento libre el normal del entorno.
Quiero agradecer y dar mi enhorabuena a as personas que han colaborado para que el Centro de Salud de Aiete sea hoy en día una realidad. En especial . gracias a Lantxabe y a cada uno de los componentes del Grupo de Impulso del Centro de Salud de Aiete