El árbol está al final de la calle, debía crecer hacia el norte, pero otro platanero impide que sus ramas crezcan en esa dirección y, como es natural, lo hace hacia el sur, porque no tiene nada que se lo impida.
El platanero en cuestión está inclinado, totalmente descompensado, y si no se poda, se caerá.
Una vecina nos pide dirigirnos al ayuntamiento y humildemente suplica que ‘si no podar todo el árbol, sí al menos alguna rama de las que se proyectan sobre el Paseo de Aiete’
En la foto es difícil apreciar este deterioro porque el platanero ha desarrollado sus hojas, pero cuando está pelado el desequilibrio es evidente. Ahora también se ve cómo el tronco está escorado. Sirva esta nota para aclarar a la Concejala Delegada que lo solicitado por Lantxabe desde hace años no es un capricho de una asociación de barrio. Ella afirmó en su día, no hace mucho, que se podan los árboles a solicitud de la vecindad. ¡Hor dago!. En este caso es una súplica al cuadrado -vecinas x asociación- y se alarga en el inmemorial tiempo, tanto por la vecina en cuestión como por la propia Lantxabe
El recorrido por el barrio lo hizo una amplia delegación de Lantxabe, acompañando a Mariaje Idoeta, Concejala Delegada de Participación Ciudadana
El Diario Vasco –Viernes 6 de marzo de 2020– recogía las reivindicacones ambientales del barrio con un artículo al que acompañaba la foto de más arriba; firmaba Josu González. Se puede leer íntegro en esta web. Acaba así
“Para la asociación de vecinos de Aiete resulta «asombroso y hasta extravagante» que no se poden los árboles de la calle Izaburu.
Las ramas son vitales para que los árboles puedan realizar la fotosíntesis, pero es necesario podarlas una vez al año. Para Lantxabe, esta circunstancia no sucede como debería en Aiete y afirman que «la gente que vive en esta zona se siente abandonada por el departamento de mantenimiento urbano»”.
El peligro es que se CAIGA por estar tan inclinado y desequilibrado desde el punto de vista de su peso y longitud de las ramas (palanca). La caida de este arbol por su gran porte traerá muchos problemas, esperemos que no humanos.