El olor fétido, que antes había sufrido Aiete -y seguramente Hernani y Astigarraga-, ahora ha llegado a Martutene, Amara, Gros y al centro de la ciudad
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Solución para los malos olores en Aiete | Aiete – Lantxabe – Katxola – Ayete
También hemos recibido correos electrónicos referidos al desagradable aroma, que obliga a tener las ventanas cerradas
Dicen en el ayuntamiento que no se ha establecido el origen del desagradable mal olor, pero hace años que se sabe, Algo está podrido en Donostia, lo sabemos por el mal olor | Aiete – Lantxabe – Katxola – Ayete el ayuntamiento conoce y el gobierno vasco está avisado de que el mal olor procede de la papelera de Zikuñaga, Papelera Guipuzcoana S.A., ubicada en Hernani. El Ayuntamiento de Donostia, en colaboración con el Departamento de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno Vasco, encargó un estudio a una empresa catalana. Este estudio detectó que los malos olores los produce el dimetil sulfuro, producto resultante del proceso de producción de la fábrica de Hernani. Las emanaciones malolientes se deben a mercaptanos, que son derivados del sufrídico, que huele a huevo podrido
Hace poco más de una década se colocaron estaciones meteorológicas y tras muchas mediciones detectaron varios focos de emisión. Una de las fuentes era el vertedero de San Marcos, donde se enterraban toneladas de residuos que generaban un aroma nauseabundo. Actualmente ya está clausurado. Otro foco era la EDAR de Loiola, estación depuradora de aguas residuales que podía emitir algún olor molesto muy puntual. Un tercer núcleo es la cementera Rezola de Añorga cuyos hornos crematorios han sido utilizados para destruir residuos orgánicos [en su día las ‘vacas locas’]
El cuarto centro productor de infectos identificados era la papelera de Hernani. En su día, la asociación ecologista Eguzki también denunció contaminación odorífera proveniente de esta empresa situada cerca de Aiete y cuyos malos olores se producían principalmente de noche, fruto de las brisas terrestres nocturnas con dirección Sur.
Se puede decir que la situación anticiclónica facilita la propagación del mal olor por Aiete y por Donostia, que el fenómeno de inversión térmica contribuye a la expansión de la fetidez. Esta situación se produce principalmente en invierno, que propicia la aparición de ‘txapelas’ de contaminación. Pero eso no exime al gobierno vasco, a la diputación y al ayuntamiento que pongan manos a la obra, tras más de 10 años de denuncias.
¿‘dimetil sulfuro’ de la papelera?. Pero además. ¿No os habéis dado cuenta que los responsables de la gestión pública han perdido el olfato? -y eso desde mucho antes que la invasión del Covid