Joseba Zaldua y Aihen Muñoz desfilaron al frente de la compañía txuri-urdin portando la bandera de su ciudad
[También dieron un paso adelante en el campo y el equipo lo notó].
Los dos donostiarras del once titular interpretaron la melodía que tocaban con rigor y sentimiento
Imanol les hizo desfilar al frente de la compañía txuri-urdin portando la bandera de su ciudad y el equipo lo notó. La condición de donostiarra otorgaba un grado y el míster optó por colocar a Zaldua, el de Aiete, y a Aihen [¿Quién se atreve a decir que no es donostiarra?] a ambos lados de la fila de tamborreros y barrileros.
Los abanderados de la Real fueron los de casa. El Orfeón puso los pelos de punta y la Real saltó al césped con el mejor equipo posible.
Ya en el juego, Joseba, mantuvo a raya a Joao Félix y le ganó en un uno contra uno con el que el portugués se metía en el área. Siempre solidario en las ayudas, acertó con el momento para lanzarse a la travesura, cual gastador que baila fuera de sitio con su cuchillo gigante. Lo hincó en la jugada del gol. Recorrió toda la banda para poner un centro espectacular en la cabeza de Januzaj. El barrilero belga hizo el resto. Dicen que un buen centro es medio gol. El de Zaldua fue monumental, lo mismo que el pase de Silva que le puso el balón por delante.
Aún robaría más balones Zaldua, como el que casi acaba en gol de Merino en el 67. No se cansó de correr. Siempre al son de su corazón donostiarra.
Joseba, aquel chaval del Axular, 29 años ahora, por fin ha podido esquivar las lesiones que le han perseguido de forma habitual para dar un rendimiento notable esta temporada. De momento, ya ha jugado más que en todo el curso pasado entero con tres asistencias de gol, dos a Januzaj y una a Isak. Su regreso ha permitido consolidar el lateral derecho con un futbolista experimentado que posee unas excelentes condiciones defensivas por capacidad de salto, velocidad de reacción, agresividad y lectura táctica. Contra el Atlético se encargó de frenar a Carrasco y a Lemar y tuvo arrestos para estirarse en ataque y poner un gran centro a Januzaj en la jugada del primer gol. Su rendimiento es una gran noticia para Imanol porque no está sobrado de jugadores en la barrera de la treintena o más que tengan peso en la alineación, más allá del caso de Silva. Y si algo necesita a veces una Real que cuenta con una plantilla tan joven es gente veterana.