Las de la parada del autobús, que han ocasionado más de un tropezón. Su reparación ya no está en la lista de espera de las obligaciones municipales.
Cuando esta web de Lantxabe lanzó el reto de que ‘en la periferia los desperfectos pueden pudrirse’, mantenimiento urbano se molestó y el resultado está a la vista
Se puede afirmar, una vez más, que cumplir con los compromisos es un apremio sobre los mandatarios, un vínculo de obligado cumplimiento con la ciudadanía. Esta, con la denuncia o la advertencia, está dentro de la acción y de la solución o el arreglo.
Un apunte: esta pequeña reparación se podía haber hecho con la misma inmediatez, tras la primera denuncia